Los «neobancos», el término con el que coloquialmente se alude a empresas emergentes que ofrecen servicios financieros básicos con ayuda de la tecnología, tratan desde hace años de hacerse con parte del mercado en España sin que hasta el momento hayan conseguido despegar.
Al igual que la banca, estas entidades ofrecen servicios básicos como cuentas de pago, tarjetas y, en ocasiones, incluso préstamos, con la singularidad de que lo hacen exclusivamente a través de canales digitales y especialmente a través de aplicaciones móviles.
Sin embargo, aún teniendo claro este tipo de servicios surgen dudas sobre qué entidades pueden considerarse realmente «neobancos» y cuáles no, pues no existe una definición legal o una regulación al respecto.
Así, por ejemplo, existe un cierto consenso en incluir bajo esta definición algunos nombres como Revolut, N26, Bunq, Monzo Bank, Wize, Bnext o Qonto, por ejemplo, sin embargo quedarían fuera otras opciones con muy buena acogida en España como MyInvestor o Imagin Bank, propiedad de bancos tradicionales como Andbank o CaixaBank.
Y además, también es cada vez más habitual al hablar de «neobancos» entrar en otras categorías como «challenger banks», que ofrecen servicios para particulares y tienen licencia bancaria, el caso de Orange Bank, o «Banks as a service», plataformas de servicios de banca para otras empresas, por ejemplo Solarisbank.
Aunque ninguna de estas entidades se caracteriza por aportar datos transparentes de negocio o clientes que permitan elaborar un clasificación, Revolut y N26 estarían entre los «neobancos» propiamente dichos con más tirón en España.
Revolut cuenta con una licencia bancaria expedida por el Banco de Lituania y el dinero confiado en sus cuentas está protegido por el fondo de garantía de ese país, mientras que N26 ofrece a los clientes en España un número de cuenta con IBAN español, aunque los ahorros están cubiertos por Alemania.
Además de cuentas y tarjetas, servicios comunes en la mayoría de «neobancos», N26 comercializa seguros, y Bnext, una entidad de dinero electrónico registrada en España, otros productos a través de un «marketplace» o tienda online.
Los expertos del comparador kelisto.es añaden en la lista de los principales «neobancos» en España a Rebelion Pay, que opera a través de una entidad de dinero electrónico inglesa y se limita a ofrecer cuentas y tarjetas; así como a Vivid Money, agente vinculado a Solarisbank, con cuentas, tarjetas y productos de inversión.
Completarían la lista Orange Bank, que actúa en España como sucursal de una entidad comunitaria y que está cubierta por el fondo de garantía de depósitos de Francia, con una oferta de cuentas y tarjetas a la que recientemente ha sumado préstamos de consumo.
¿UNA ALTERNATIVA A LA BANCA?
Para el cliente que busca tener todos los servicios financieros en una misma entidad, no lo es, ya que los «neobancos» suelen estar especializados en unos productos muy concretos (cuentas y tarjeta), pero sí podrían ser una alternativa para un público al que no le importe trabajar con varios proveedores distintos.
Para los expertos de kelisto.es, al tratarse de compañías más pequeñas que los bancos tradicionales pueden ser más ágiles para aplicar cambios y mejoras en sus procesos y testar distintas tecnologías y productos, lo que les permitiría responder más rápido a las necesidades del cliente.
Entre las principales ventajas están el precio y las condiciones de sus productos que pueden ser «muy competitivas» si se comparan con las de la banca tradicional gracias a que operan exclusivamente online, lo que puede ser a su vez una barrera para otros clientes.
Por otro lado, hay que tener presente que muchos de estos «neobancos» no pueden ser la única opción financiera de un cliente, puesto que todavía no permiten domiciliar prestaciones de desempleo, el abono de pensiones o el pago de impuestos.