La nueva herramienta, diseñada por investigadores de las universidades Complutense de Madrid y Granada y la compañía biomédica Atrys Health, utiliza biosensores de grafeno y su desarrollo ha sido seleccionado en el marco del Fondo «Supera Covid-19».
Este fondo ha sido organizado y activado por la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y el Banco de Santander, para financiar programas, proyectos y medidas de apoyo al ámbito universitario para minimizar el impacto de la crisis provocada por el coronavirus en los ámbitos sanitario, educativo y social.
El dispositivo analizará las muestras de exudados nasofaríngeos -al igual que hace la PCR- de pacientes sospechosos, ha informado hoy la Universidad Complutense.
Las principales características de esta herramienta, bautizada como «RAP-ID19», son la elevada sensibilidad, la especificad, la rapidez (inferior a 15 minutos), fácil utilización, amplia portabilidad y bajo coste.
«RAP-ID19 pretende llevar a cabo un diagnóstico rápido, fiable y masivo de la Covid-19 en múltiples lugares como aeropuertos, oficinas, calle o centros de atención primaria, permitiendo un análisis rutinario prácticamente a todos los niveles de la sociedad», ha explicado Marco Filice, director del Grupo de Investigación de Nanobiotecnología para Ciencias de la Vida de la Facultad de Farmacia de la UCM.
Según los expertos, la plataforma diagnóstica propuesta aunará las ventajas de los diagnósticos moleculares como la PCR -más específicos y sensibles- con las de los test rápidos de detección directa del virus -rapidez, bajo coste, uso descentralizado- y sin necesidad de personal entrenado o laboratorios especializados.
La duración estimada de este proyecto será de unos nueve meses, ha informado la Universidad Complutense.
Filice ha detallado que, en una fase inicial, se fabricará y caracterizará el sensor en grafeno de acuerdo con unas técnicas que han sido optimizadas por el grupo de Nanoelectrónica, Grafeno y materiales bidimensionales de la Universidad de Granada dirigido por Francisco Gamiz Perez.
El sensor optimizado será puesto en marcha en su superficie para conseguir la inmovilización orientada de unos anticuerpos específicos según unas técnicas optimizadas por el grupo de la Universidad Complutense.
La universidad granadina diseñará y fabricará además un prototipo del equipo electrónico portátil que medirá la señal eléctrica generada en el sensor, y una vez preparado la Complutense se encargará de llevar a cabo la validación preclínica del biosensor.
«Estamos muy confiados en que podremos lograr una prueba diagnóstica con elevada fiabilidad para la detección directa del SARS-CoV-2», ha manifestado Filice.
Y ha señalado que además de las ventajas directas para la sociedad a todos sus niveles, «esperamos que gracias a RAP-ID19 se pueda optimizar la gestión de futuras emergencia de la COVID-19 generando un impacto positivo tanto para el sistema sanitario como para la economía nacional».
Estrella Digital