Estas mascarillas podrán ser utilizadas por la población durante varios días y también están pensadas para profesionales sanitarios, personal de líneas aéreas y para fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, en cuyo caso la recomendación es usar una al día.
Llega al mercado español el primer millón de mascarillas FFP2 desarrolladas por un grupo de investigación del #IATACSIC y @bioinicia
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— IATA CSIC (@iata_csic) July 29, 2020
Se estima que se fabricarán alrededor de 800.000 unidades en julio, hasta cuatro millones al mes en agosto y septiembre y a partir de octubre 11 millones a la semana, según informa la delegación valenciana del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
El material ha sido desarrollado por el IATA, centro del CSIC, junto con Bioinicia S.L., empresa de base tecnológica del CSIC, para filtros de mascarillas FFP1, FFP2, FFP3 y quirúrgicas a partir de nanofibras en el marco de los proyectos aprobados por la plataforma Salud Global del CSIC y la Agència Valenciana de la Innovació (AVI) como iniciativas para abordar la pandemia de la COVID-19.
La próxima semana llegará al mercado español el primer medio millón de mascarillas producidas con este material filtrante, y a lo largo de las próximas semanas también se comercializarán en Alemania y Latinoamérica.
Estas mascarillas cuentan con la certificación especial CPA FFP2 que Europa ha lanzado para resolver la emergencia que se creó al interrumpirse el comercio de ciertos materiales de filtración que provenían principalmente de China, y han sido certificadas por DEKRA y APPLUS+.
José María Lagarón, del CSIC, ha afirmado que alcanzar niveles de FFP2 en fabricación es muy complejo sin el uso de la tecnología convencional y solo la empresa Bioinica S.L. puede ofrecer este tipo de infraestructura a nivel nacional y en otros países de Europa para fabricar este tipo de mascarillas.
Bioinicia S.L. es cotitular junto con el CSIC de la patente de la tecnología, y de sus redes de distribución que suministran a organismos públicos, farmacias y supermercados.
Según el CSIC, esta iniciativa no pretende competir a medio y largo plazo con los fabricantes de mascarillas ya existentes sino crear una red de fabricantes de calidad a los que servir el filtro o las máquinas industriales para hacerlo.
Esta tecnología presenta bastantes ventajas frente a la tecnología tradicional y además es igual de económica o más que esta.
Se espera que varias empresas españolas lancen al mercado unas mascarillas sanitarias y quirúrgicas lavables utilizando este filtro, y además están a punto de cerrar un acuerdo de distribución con una gran empresa que distribuye en Latinoamérica, Canadá y Estados Unidos, para comercializar entre dos y cuatro millones de mascarillas durante los meses de julio y agosto, ha anunciado Lagarón.
Este grupo de investigación también ha desarrollado un modelo de filtro antimicrobiano y otro biodegradable, que llegarán al mercado en septiembre. A partir de septiembre, todas las mascarillas hechas con el filtro de Bioincia S.L., denominado PROVEIL, serán por defecto antimicrobianas.
Estrella Digital