Es A change is gonna come (1964) de Sam Cooke. Es California Dreamin (1966) de The Mamas & The Papas. Es Be my Baby (1963) de Phil Spector/The Ronettes. Es Purple Haze (1967). Es Love me do (1963) de los Beatles. Es Street Fighting Man (1968) que es la mejor de este grupo. Es Good vibrations (1967) de The Beach Boys. Y es A like a Rolling stone (1965) de mi admirado Bob Dylan.
Siempre están en la lista de las mejores que se hacen en el mundo del rock´n´roll. Eso si esta siempre estará encabezada cualquier ranking que se precie por Ne me quitte pas de Jacques Brel.
Hoy hablamos de A like a Rolling stone que toca. Se hizo el día 16 de Junio de 1965. Otro día será para Ne me quitte pas.
Y es que este mes de junio celebramos los cuarenta y cinco (jóvenes) años de la canción. Y hay un libro que cuenta la historia de esta melodía. La ha escrito Greil Marcus y se titula Like a Rolling stone. Bob Dylan en la encrucijada (Global Rhytm). Una canción que la revista de la música pop ‘Rolling Stone’ la ha considera la mejor de todas. Búsquelo, lo merece.
Cuenta en el todos los recovecos de su letra. Todos sus posibles significados. Su grabación reconstruida minuto a minuto. Sus orígenes. Sus influencias. Por supuesto las de Muddy Waters y su Rolling´stone y La bamba de Ritchie Valens.
Esta canción la presentó el cantante y compositor en el Festival de Newport del 25 de julio de 1965 y ya no nada fue lo mismo. Se juntaban las letras con sentido y contenido con las guitarras eléctricas en plena efervescencia. Y eso suena duro, suena fuerte, suena bien potente.
La canción se oye bien hoy en día. Se oye su En otros tiempos ibas muy elegante, estabas en la flor de la vida y arrojabas centavos a los pobres…
Suena la desazón, la pena y la desesperanza durante a lo largo de más de seis minutos. Dime que sientes, coño, sin un puto hogar, como una puta bala perdida.
Es el momento de escucharla una vez más. ¡Que suene!