Con optimismo y con la presencia de numerosos coleccionistas, la feria internacional de arte contemporáneo ARCO abrió las puertas a una 30 edición en la que los galeristas han mostrado su apoyo al nuevo director Carlos Urroz y en la que se puede contemplar obras menos arriesgadas que otros años.
Desde primera hora, las instalaciones se han ido llenando de profesionales y coleccionistas, a los que están reservados este miércoles y jueves, y han empezado a aparecer puntos rojos en las obras exhibidas por las 197 galerías que participan en lo que parece una nueva andadura de ARCO.
Una de las más madrugadoras ha sido la baronesa Thyssen que poco después de abrirse las puertas ya había adquirido la obra «Espejos y neón» de Ivan Navarro en la Galería Distrito 4 y tenía prácticamente cerrada la de una obra de Juan Genovés en la Galería Marlborough.
También han empezado a aparecer los carteles que señalan las compras de la Fundación Coca Cola, como la obra de Philipp Fröhlich de la galería Soledad Lorenzo.
La participación de Rusia como país invitado está teniendo muy buena acogida, como lo muestra las numerosas ventas que se están haciendo, destacando las de las cajas de Marina Alexeva en la Galería Gisich.
Elena Ochoa y Norman Foster, Manuel Borja Villel, director del Museo Reina Sofía, o Borja Baselga, director de la Fundación Banco de Santander, son algunos de los coleccionistas que paseaban por los amplios pasillos de la feria y que se han mostrado muy satisfechos por el nivel de calidad de ARCO.
Este ambiente lo viven con optimismo los galeristas que coinciden en su apoyo a Urroz y en el diseño que ha hecho de una feria más pequeña y profesionalizada. Con lo que no están satisfechos en con el 18 por ciento de IVA que se carga en las obras de arte y cuya bajada se ha convertido en una reivindicación en la feria.
Luis Valverde, de Espacio Mínimo, aludió a la necesidad de tener más ayuda para exportar, mejores condiciones de mecenazgo y un IVA cultural «ya que es más barato comprar en otros países».
Para Espacio Mínimo el año pasado la feria «fue excelente» y por ello esperan tener resultados similares. «La gente está más ilusionada, es una feria más elegante. Creo que las crisis provocan un cambio y eso es bueno», señaló a Efe el galerista que ya tenía vendidas varias obras.
Otra de las que ha hecho de la reducción del IVA una campaña es Helga de Alvear que en la pasada edición no participó en ARCO «en protesta por su organización».
La galerista, que también es coleccionista y ya aprovechó la tarde de ayer mientras se hacía el montaje para comprar algunas piezas, comentó que no se podía creer que desde que se han abierto las puertas de la feria ha comenzado a vender.
«Es la primera vez que veo que hay interés, la gente quiere ayudar para que ARCO suba otra vez para arriba. Hay mucho entusiasmo», ha comentado.
Para De Alvear la feria está volviendo al nivel que tenía hace unos años «y que fue decayendo» y ello gracias a la elección de Urroz como director. «Es la única persona adecuada, ha trabajado en el mundo del arte y lo conoce bien».
A pesar de su optimismo, cree que en esta edición «ha hecho lo que ha podido, ya que todavía falta la presencia de las galerías internacionales más importantes».
En cuanto al IVA, consideró que el objetivo son las ventas «y estas no se consiguen si no baja el IVA. Pedimos que se baje a un nivel de arte no de lujo, ya que nos comparan con los Ferrari», comento la galerista.
De Alvear ya había vendido una obra de Santiago Sierra a la Fundación Masaveu y que como trabajo más caro ha traído a la feria una pieza de juventud de Elena Almeida que vende por 100.000 euros.
«La gente procura equilibrar precios. Hay que tener sensatez tanto en la oferta como en los precios».
Uno de las búsquedas habituales de ARCO es la de la obra más cara. En esta ocasión puede ser la de Antonio López «Madrid desde Torres Blancas», que exhibe la Galería Marlborough, aunque también en el grupo entraría la pieza de Alexander Calder, que Elvira González vende por 1.970.000 euros, o el Morandi que exhibe Leandro Navarro, cuya precio no se ha facilitado.
Redacción