El torero Miguel Abellán continúa hospitalizado tras haber sufrido una grave cogida en la boca cuando se disponía a matar a su primer toro en la Plaza de las Ventas de Madrid.
Una tarde difícil para el diestro madrileño que se presentó en la Plaza de las Ventas, cuando se cumplen trece años de su alternativa. Ataviado con un traje de luces blanco y plata, Miguel Abellán saltó al ruedo dispuesto a salir por la puerta grande pero la cosa se truncó para el matador.
Todo ocurrió cuando Abellán se dispusó a terminar con la vida del toro. Entonces, tras un pinchazo fallido, el diestro entro de nuevo a matar y justo al salir del embroque, el toro enganchó al diestro de la cara. Unas imágenes que ponen los pelos de punta.
Tras el aparatoso suceso, Abellán fue trasladado a la enfermería de la Plaza donde fue intervenido por el doctor Máximo García Padrós. «Herida contusa en el labio inferior, que le causó destrozos en el músculo orbicular, con avulsión de piezas dentarias, y ligera conmoción cerebral», informaba el primer parte médico sobre la salud del diestro.
Pero ya se sabe que los matadores están hechos de otra pasta y, según ha informado la web oficial de Miguel Abellán, «el torero se encuentra fuera de peligro aunque, en estos momentos, permanece bajo los efectos de la sedación después de ser intervenido».
Mientras el diestro se recupera, muchos amigos y compañeros de profesión han mandado sus tuit más esperanzadores, como ha sido el caso de José María Manzanares. «Un abrazo a mi compañero Miguel Abellán que ha resultado herido. Espero que no sea mucho», tecleó el diestro.
Estrella Digital/Ep