Los vestidos de Gucci es lo que tienen, que a pesar de ser exquisitos, no son exclusivos de nadie. Pero eso sí, las piezas hacen que todas las mujeres luzcan figura de manera despampanante y para una portada de revista nada mejor que tirar de un estilismo así.
Hace unos meses fue Beyoncé la encargada de protagonizar uno de los reportajes fotográficos más sensuales gracias al vestido de Gucci. Un traje con cuello halter que simula pétalos de rosa y una falda de tul negro deja entrever sus piernas.
Pero ahora ha sido Miley Cyrus la que ha tirado de ese outfit para protagonizar la primera plana de Prestige. Con un semblante muy sensual y una melena cortita con flequillo, la joven artista ha dejado constancia de que a pesar de su apariencia «no es una chica mala».
No es su estampa más carismática, pero sí una de sus portadas más seductoras. Donde ha demostrado que atrás quedó esa niña Disney que engatusaba a los peques de la familia. Ahora Cyrus, que mantiene una relación sentimental con Liam Hemsworth, es toda una mujercita hecha y derecha.
Creemos que este plagio ha sido fruto de una coincidencia más, aunque también se puede pensar en si Cyrus quiere seguir los pasos de Beyoncé. Si es así, ¿también será su sueño ser mamá?
Estrella Digital/Efe