La hija del dueño del imperio Inditex pasa sus primeros días de casada en Camboya y Australia. Marta Ortega y su flamante marido, Sergio Álvarez, son los protagonistas de la portada de la revista Lecturas de esta semana. En páginas interiores, se ven fotografías de la pareja paseando por las calles de Sidney, vestidos con ropa informal y toman café mientras caminan ajenos a los paparazzi que les estaban siguiendo.
Camboya ha sido el primer destino elegido por el matrimonio Álvarez Ortega. Los jóvenes se alojaron en el Hotel Amansara que cuenta con 24 suites donde pasar una noche supera los 1.000 euros. La amplia habitación, que se puede ver en las fotografías, tiene zona de día, de noche, un gran vestidor, jardín con comedor al aire libre y una piscina privada de 30 metros cuadrados. Con tanto lujo, es normal que la pareja no se relacionara demasiado con el resto de huéspedes excepto en una de las mañanas que pasaron que el país asiático, cuando bajaron a desayunar al restaurante del hotel.
Segundo destino: Australia
Desde Camboya, Marta y Sergio volaron hacia Australia en un jet privado. Sidney fue la ciudad en la que aterrizaron. En esta ocasión, volvieron a decantarse por un hotel de superlujo como el Four Seasons. Los recién casados se alojaron en la suite presidencial: 156 metros cuadrados, estancias de día y de noche y todo tipo de comodidades. En la ciudad australiana la pareja sí se decidió a hacer turismo e, incluso, dieron un paseo en barco. De nuevo, en esta ocasión, el atuendo de ambos fue sencillo, cómodo y veraniego, perfecto para el calor de la época estival. Ella con falda corta negra, camiseta azuel, sandalias y un moño; él con un polo amarillo, bermudas marrones y zapatillas de deporte. Eso si, muy conjuntados en los complementos, pues ambos llevaban gafas de sol estilo aviador, tan de moda en estos días. Tras el paseo en barco, la pareja repuso fuerzas en el restaurante The Ivy Pool Bar y, después, compraron café en Starbucks y, en vez de tomarlo en el establecimiento, decidieron dar un paseo por las calles de Sidney donde se vio la complicidad que une al matrimonio.
La luna de miel no se extendió muchos más días, pues ambos han de regresar y retomar los entrenamientos para los Juegos Olímpicos de Londres.
Redacción Estrella Digital