Kim Kardashian ha prohibido el paso a toda mujer que quiera entrar en el camerino de su chico, al menos cuando no esté ella presente. Así de contundente se ha mostrado la celebrity tras conocerse que su chico tiene especial facilidad para fijarse en las mujeres guapas cuando no está cerca de su chica.
Al parecer, la celebrity había encargado a su hermano Rob que velara por la fidelidad de Kanye West durante sus conciertos, pero como afirma una fuente cercana de Kim Kardashian al diario ‘The Sun’, no sirvió de nada.
Esta faceta oculta de la celebrity surgió por sus celos hacia el continuo flirteo que tiene Kanye West cuando se encuentra con Rihanna, pero no solo ha ocurrido con la cantante. Por eso, Kim no quiere que nadie se acerque a su chico, ni siquiera sus amigos, según informa ‘The Sun’.
«Kim era todo para Kayne al principio, pero cuando empezó a relacionarse con otras personas ella comenzó a comportarse de esa manera», contaba una fuente cercana a la pareja al diario británico.
Lo que parecía una relación romántica parece que va a acabar siendo enfermiza.