Mario Gas dejará la dirección del Teatro Español, dependiente del Ayuntamiento de Madrid, el próximo 31 de julio, tal y como acordó el pasado mes de marzo con los responsables municipales. «No tengo sombras que reprocharme. He intentado ser fiel a mi mismo», dijo entonces el actor y director para acallar «extrañas teorías de contratos blindados e irregularidades» que habían circulado.
«Me voy porque los actuales responsables del Consistorio creen que es bueno crear un equipo nuevo», ha expuesto calificando esta decisión de «lógica». «El nuevo equipo tiene aquí gente dispuesta a hablar, a entender que los tiempos cambian. Trabajaremos en el teatro sin rencor, malicia o malos rollos», apostilló.
Tras ocho años al frente del Español, Mario Gas confesó que se va «con una gran riqueza personal y vital, que no económica». Asimismo, aseguró que no va a optar a ser director del Teatre Nacional de Catalunya. «No creo en los concursos y aquí se plantea así. El amor cuando se acaba se acaba y ahora tengo proyectos para hacer algunas obras, también descansar, o incluso actuar asiduamente», ha declarado el director del Teatro Español.
Compañerismo y profesionalidad son términos con los que definió su trabajo en este tiempo y añadió que también hubo «camaradería, alegría e incluso fricciones».
Por otra parte, Mario Gas recordó que siempre ha sido «defensor del teatro público» pero aclarando que no es enemigo de lo privado. «Hay que convivir y potenciar a la empresa privada que cree que con el arte se puede vivir», ha dicho.
«Ha sido una época especial de mi vida, con cosas muy buenas en las que me he sentido realizado, al servicio del teatro y de la sociedad. Hemos hecho camino colectivo», afirmó.
Estrella Digital/EP