Antonio Resines no tiene pelos en la lengua y lo demuestra en cada una de sus apariciones. La última, en una entrevista concedida a Intereconomía. El tema esta vez fue el complicado final de ‘Los Serrano’. «A ver cómo lo digo de una forma fina… Es que era muy difícil de acabar, esa es la verdad, es la excusa… Y luego, pues era raro (…) Era una cosa como absurda. Patético», espetó el actor.
La serie dio muchas alegrías a sus protagonistas y grandes cuotas de audiencia a Telecinco, pero el final dejó insatisfechos a muchos de sus seguidores tras ocho temporadas. Resines señala «Imagínate, los niños habían crecido, y la niña tenía que meterse debajo de la mesa para taparse los pechos (…) Le pusieron unos tacos a la mesa para que se subiese de altura. A mí me pintaron un poco las canas de la barba, porque, en seis años, imagínate».
Respecto a la serie que protagonizó tras los Serrano, la versión española de Cheers, Resines comenta, «Hubo un problema: los guiones estaban bien, y yo invito a la gente que me diga si no es así. Pero parecía que en este país todo el mundo ha mamado, aparte del pecho de su madre, de Cheers. Fue como si hubiésemos matado a Jesucristo, el horror».
Al actor no se le pasó a hablar de la nueva moda de los famosos de aparecer en realitys. «Si tuviese que dar de comer a mis hijos, pues sí, pero yo ni canto, ni bailo, ni imito», remarcó.
Redacción