Parece que la joven cantante lo tiene claro, ella no es de esas chicas que se pasan el día llorando con un paquete de pañuelos bajo el brazo, viendo películas románticas y comiendo chocolate porque ha roto con su novio.
Miley Cyrus se convierte en portada de la revista Cosmopolitan para el número del próximo diciembre, aunque saldrá a la venta a finales de noviembre. Y es que si la gente pensaba que Miley iba a estar pensando en Liam Hemsworth en todo momento, se equivocaban.
La intérprete de Wrecking Ball, no es de esas chicas que se deprimen por una ruptura y ella lo ha querido dejar bien claro: «Estoy en el mejor momento de mi vida«. Y es que, lo que está claro, es que la joven de 20 años está en el ojo del huracán mediático desde el pasado mes de agosto, cuando dejara a todo el mundo boquiabierto con su actuación en los MTV Video Music Awards.
La que fuese Hannah Montana, ya enterrada por supuesto, es una de esas chicas que miran hacia adelante y que ven después de una ruptura un nuevo horizonte de posibilidades. «Dios quiere que mi vida sea un éxito«, confiesa para Cosmopolitan.
Su amor, la música
Y es que a pesar de que se rumorea que tiene nueva pareja, lo que está claro es que ella tiene una nueva relación, una relación con su música, su único amor.
«Tengo que tratar a mi música como una relación, entregarle mi tiempo y toda la atención que se merece. Este es mi principal amor en este momento«, declaraba para la revista. Y es que no es para menos que le dedique tiempo a la música, aparte de que es con ella con la que se gana la vida, la que le ha colocado en el punto de mira de todos los medios.
Aunque parezca que sea feliz, es inevitable pensar si estas declaraciones son una estratagema para volver a captar la atención del actor. Sin embargo, está claro que no ha sido de esas exnovias que tardan una eternidad en dar el paso y seguir adelante con su vida.
Sea como fuere, Miley Cyrus ha conseguido lo que muy pocos pueden conseguir, ser ella misma en cuanto a la música y dar mucho de que hablar, ya sea para bien o para mal.