Partidaria del «que hablen de mí, aunque sea mal», Mónica Pont no es de las que pone muchos reparos a nada con tal de seguir en candelero. La exconcursante de ‘Campamento de verano’, se ha despachado a gusto esta semana en la revista ‘Primera Línea’, en la que no ha dejado títere con cabeza al tiempo que se convertía en pionera del «desnudo con tocamiento», algo novedoso si se compara con los tradicionales desnudos de ‘Interviú’, con simples fotos en top-less.
En la habitual sección «En la cama con Torito», en la que éste aparece sujetando los pechos de la actriz mientras hace que la ausculta, Mónica recuerda su paso por el citado programa de Telecinco y asegura que Lucía Etxebarria»está tan sumamente loca que se cree sus locuras y las historias que escribe». Según ella, la escritora «no se cambió las bragas en todos los días que estuvo en el campamento y comía con la misma mano con la que daba de comer a sus perros», por lo que subraya que «solamente si eres guarra puedes hacer este tipo de cosas, y ella no se duchaba».
A otro de sus compañeros en el polémico campamento, Víctor Sandoval, le define como «mal profesional, mal compañero y mala persona», por lo que dice que «no entiendo qué hace en televisión. No aporta nada […] está como una cabra».
Fuera de este espacio, también tiene palabras para Jorge Javier Vázquez, la persona que le hizo pasar «el peor momento» de su vida cuando la expulsó del plató de ‘Sálvame’. Para ella todo se debió a que «nunca me perdonará que, en una época determinada en que éramos amigos y nos llamábamos constantemente, un día dejara de saludarlo porque triunfé y me moví en otro círculo, con amigos del Príncipe Felipe».
A estas críticas se unen las que dedica a otras dos colaboradoras de ‘Sálvame’ como Lydia Lozano, Chelo García Cortes y Rosa Benito. A la primera la que describe como «una yonqui de la tele. Es interesada, mala persona, va de víctima, y la gente se lo cree», así como que «le hubiera encantado ser la mujer de un torero», algo que corrobora confesando que «en el año 1996 la vi salir de un baño con Rafi Camino». A la segunda la llama «el bufón» del programa, una persona a la que dice han perdido todo el respeto, mientras que a la tercera la compara con «la reencarnación de la Jurado, sólo le falta hacer un musical», aunque aclara que «me horroriza».
Mónica también revela algunas cosas relacionadas exclusivamente con ellas. Así, resalta que «el éxito Pedro Ruiz está abajo», y confiesa que de joven dejó que alguien la grabara mientras practicaba sexo. Eso sí, puntualiz que «yo no me enamoro de un físico ni una cartera, como han llegado a decir. A mí me mueven la inteligencia y el corazón».