El premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez se encuentra «muy frágil» y «existen riesgos de complicaciones de acuerdo a su edad», según ha confirmado su familia, sólo una semana después de salir del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, en México DF, donde ingresó «por un cuadro de deshidratación y un proceso infeccioso pulmonar y de vías urinarias».
A través de un comunicado, sus familiares han informado de que se encuentra estable, pero reconocen de los riesgos relacionados con su avanzada edad –de 87 años–. Asimismo, el texto asegura que 'Gabo' seguirá convaleciendo en su casa y, tras agradecer las múltiples muestras de cariño, piden que se respete su intimidad.
Este comunicado llega después de que varios medios hayan especulado sobre la salud del escritor. El diario mexicano 'El Universal' insiste en que su salud es «muy delicada» y añade que se enfrenta a un pronóstico médico que no le es favorable por el avance de un cáncer linfático que padece y que ya le ha afectado pulmón, ganglios e hígado.
El periódico, que recurre a sus propias fuentes, afirma que el cáncer contra el que luchó García Márquez en 1999 «ha invadido otras partes de su cuerpo». Asimismo, destaca que por acuerdo familiar y médico, el autor de 'Cien años de soledad', radicado en México desde hace más de 50 años, está fuera de un tratamiento oncológico.
La asistente del escritor, Mónica Alonso, ha asegurado que la información difundida por este medio mexicano sobre su posible recaída de su enfermedad de cáncer es falsa. «Nunca nadie nos ha hablado de cáncer, ni a la familia, ni a nosotros», ha señalado en declaraciones a la agencia de noticias DPA.