Es la decisión a la que han llegado este martes los ministerios de Educación y Universidades junto con los responsables educativos de las comunidades autónomas y los rectores, que han mantenido una reunión de forma telemática durante casi seis horas.
Desde el pasado mes de enero estaba previsto que este curso la EBAU (en algunas comunidades se denomina EVAU) se tenía que celebrar antes del 18 de junio y las pruebas extraordinarias, es decir la segunda oportunidad para aprobar, antes del 10 de julio o del 16 de septiembre, dependiendo si se celebra en un mes u en otro en las distintas autonomías.
Ahora se trabaja en coordinación con todos los agentes implicados en determinar las fechas del aplazamiento, han señalado en una nota conjunta los departamentos de los ministros Isabel Celaá y Manuel Castells.
Además, hay que adaptar el calendario de apertura del periodo para la matrícula universitaria al de la EBAU.
Según el proyecto sobre la EBAU para este curso del Ministerio de Educación, además de las fechas antes citadas, se fijaba que no habría cambios significativos respecto al curso anterior, es decir, la calificación se sigue calculando entre el 40 % del resultado de la prueba y el 60 % de la calificación final de la etapa.
Estudian segundo de Bachillerato alrededor de 295.000 alumnos, aunque no todos se presentan a las pruebas para ir a la Universidad.
La reunión ha sido presidida por el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, y el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón.
Según Tiana, en la reunión se ha trabajado «de forma coordinada» con el fin de asegurar que ningún estudiante «pierde el curso» por las circunstancias que se viven y que la EBAU «se producirá en condiciones de equidad y de justicia para todos».
También han participado la secretaria general de FP, Clara Sanz; y la directora general de Evaluación y Cooperación Territorial, Consuelo Vélaz de Medrano. Además de los representantes de las comunidades autónomas y de la Conferencia de Rectores CRUE.
Según la CRUE, en el encuentro se ha acordado no tomar decisiones precipitadas, aunque «tampoco se puede dilatar mucho más la toma de decisiones», y se ha asumido que el objetivo prioritario es despejar cuanto antes la incertidumbre y garantizar que el acceso a la Universidad se va a producir en términos de equidad y justicia para todo el estudiantado.
Durante el encuentro se han planteado diferentes opciones de reprogramación de contenidos y de evaluación, ha informado la CRUE en un comunicado, en el que detalla que estas medidas estarán determinadas por la evolución de la pandemia.
Los rectores han subrayado «la importancia de que el aplazamiento de la realización de la EBAU no vaya más allá de la primera semana de julio para garantizar el correcto desarrollo de su corrección y los subsiguientes trámites administrativos».
El aplazamiento de la EBAU era una de las peticiones del alumnado por el coronavirus, como ha señalado en una nota la Confederación estatal de Asociaciones de Estudiantes (Canae), que reconoce la «incertidumbre» especial entre aquellos que deben enfrentarse a la prueba de acceso a la universidad.
Canae apuesta precisamente por «aplazar de forma consensuada la prueba de acceso a la universidad y todos los procedimientos posteriores» para asegurar que todos los estudiantes disponen de las máximas garantías y «igualdad de oportunidades» en la continuación en el proceso educativo.
Por otra parte, este martes se ha propuesto también flexibilizar las prácticas de FP en el centro de trabajo y la FP dual, necesarias para superar el curso.
Y en cuanto a las pruebas de acceso a la FP de grado medio o superior para quienes no cuenten con los requisitos académicos de acceso a estas enseñanzas, se va a adaptar el calendario de las pruebas y matrícula y se mantendrá una reserva de plazas para que ningún estudiante se quede sin posibilidades de acceso.
Estas iniciativas se concretarán en una reunión de la Comisión de FP que se celebrará la próxima semana.
Por otra parte, el Ministerio de Educación ha puesto a disposición de las autonomías y de la comunidad educativa en su conjunto todos los recursos digitales disponibles y está trabajando en otras iniciativas que permitan reducir la brecha digital entre los alumnos con menos recursos.
Estrella Digital