Un argumento, el señalado por la presidenta de PIAF, Puy Oria, responsable también de la veterana Asociación Madrileña Audiovisual, AMA, en el que coinciden otros productores y responsables cinematográficos y audiovisuales consultados, que resaltan además que contiene muchas medidas positivas, no sólo económicas, algunas de ellas, reclamadas largamente.
«Pero lo primero -afirma Oria tras conocer la aprobación del Real Decreto- es leerlas en el BOE con todas las connotaciones que lleva cada una de ellas, porque tenemos ya muchas preguntas de nuestros asociados».
Destaca, no obstante, que la mayor parte de las ayudas a la producción «son créditos», e insiste porque dice que «eso siempre se malinterpreta», aunque «unos créditos blandos que nos vienen maravillosamente bien porque permiten la continuidad de las empresas».
En ese sentido, el gobierno inyectará 20 millones de euros para que la sociedad de garantías recíprocas CREA(SGR) lo «multiplique por cuarenta», ha explicado Rafael Lambea, director general de la entidad de ámbito nacional -hay 18 SGR en España-y la única que se dedica exclusivamente a avalar a pymes culturales para que éstas puedan acceder al crédito.
«En este momento, las pymes, que ya históricamente son muy débiles a nivel financiero, no están pudiendo acceder al crédito y, como cualquier otra empresa, necesitan liquidez, tienen que sobrevivir», asegura Lambea, quien considera «muy buena idea por parte del Gobierno acudir a nosotros, que somos especialistas, para responder a las necesidades».
El objetivo, señala Lambea, es «salvar el mayor número de empresas, porque ninguna puede sobrevivir tras ocho meses de inactividad total; estos préstamos les ayudarán si el escenario que contemplamos para la vuelta a la normalidad es el primer trimestre de 2021».
En gestiones destinadas sólo al cine -ya que los créditos que avalará CREA-SGR serán para todo tipo de pymes culturales, no solo audiovisuales-, Lambea calcula que se podrán mover créditos de 150 a 200 millones de euros, «aunque no pueden ser cifras cerradas porque nadie tenemos ni idea de lo que va a pasar».
«Tenemos que ver minuciosamente la letra pequeña, porque las empresas pequeñas van siempre más apretadas, las ayudas suelen hacerse siempre pensando en las mediana-grandes. Necesitamos saber y seguir trabajando. El paso de hoy me parece muy importante de cara a respaldar lo que teníamos hecho hasta ahora en el sector y una salida a 2019», considera Puy Oria.
En su opinión, el siguiente paso tras respaldar a las empresas, es «ir pensando en sacar la convocatoria de ayudas del 2020, que es lo que permitirá ir tirando. Necesitamos seguir», enfatiza la productora, preocupada especialmente por «escrutar» el tema de los incentivos.
Coincide en ello con Oria Cristina Andreu, presidenta de la asociación de mujeres cineastas de España CIMA, quien también considera «satisfactorio» el Real Decreto y «un apoyo firme al mundo de la cultura», aunque lo mejor, en su opinión, es que «reconozca la singularidad de la gente del cine y del audiovisual, que no se puede comparar con autónomos de otras profesiones».
Andreu ha valorado las medidas que benefician a las mujeres cineastas, como el aumento hasta el 75% de las deducciones a las que se pueden acoger las directoras, frente al 50% de los hombres, así como el 85 por ciento de los cortometrajes, porque es un formato «que suelen utilizar mayoritariamente mujeres».
CREA-SGR ya ha habilitado una pestaña en su web para solicitar el aval; es el comienzo de un proceso en el que la sociedad de garantías recíprocas se encarga de todo: analizar si pueden optar, y si es así, enviar la solicitud al banco.
«Sabemos que muchas empresas van a caer en el camino, que no van a aguantar, a pesar de haber recibido liquidez, por eso trabajamos con el escenario de que en el primer trimestre de 2021 la cosa esté medianamente normalizada y a lo largo de 2021 se produzca la recuperación».
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