En declaraciones a Efe durante su asistencia al desfile de Devota&Lomba en el marco de la Madrid Fashion Week, Uribes ha afirmado que «con Seda no debería pasar nada» porque se trataba de un «caso» en el que tuvo que decidir «entre prohibir o permitir».
«Y me parecía que las razones para permitir siempre son más poderosas. Por consiguiente lo que hemos hecho es favorecer que exista una nueva sociedad de gestión, y vamos a ver cómo se desarrolla, pero me parece que eso enriquece la situación y favorece el futuro», ha matizado.
Según ha añadido, lo que Cultura ha hecho al dar luz verde a Seda para operar en España es «cumplir» con su «obligación» siguiendo las directivas europeas de «favorecer la libre competencia»; y también «siguiendo la filosofía, el espíritu y la norma de la Ley de Propiedad Intelectual que es abrir el juego para que los artistas tengan distintas opciones».
«En definitiva, permitir algo siempre está más justificado que prohibirlo. Lo que hemos hecho es no prohibir una opción», ha puntualizado.
Además, para el titular de Cultura, el desarrollo de esta nueva entidad de gestión, que fue autorizada a operar a finales de agosto, también va a depender de los artistas. «Al final van a poder elegir libremente si siguen en Sgae o si pasan a Seda».
Se trata de unas declaraciones que llegan después de que este jueves la Sociedad General de Autores y Editores (Sgae) anunciara la decisión de su Consejo de Dirección de interponer un recurso contencioso-administrativo contra la resolución del pasado 31 de agosto del Ministerio de Cultura y Deporte en el procedimiento de solicitud de autorización para operar como entidad de gestión a Seda.
A través de un comunicado, la entidad presidida por Antonio Onetti puso de manifiesto su «preocupación» por considerar que la puesta en marcha de Seda supondrá «graves consecuencias» para el patrimonio cultural español y para el mercado europeo de las entidades de gestión.
Además, la Sgae hizo referencia al informe firmado por el Subdirector de la Dirección General de Propiedad Intelectual, Carlos Gervós Maíllo, en el que resuelve «no conceder» a SEDA operar como entidad de gestión de derechos de autor, ya que -entre otros motivos- tiene un plan de viabilidad económica «sin acreditar».
«No entendemos cómo es posible que el ministerio haya podido conceder esta licencia de entidad de gestión en el ámbito musical cuando un informe técnico objetivo y fundamentado, elaborado por la Subdirección General de la Propiedad Intelectual, máximo órgano competente, rechazaba precisamente esta posibilidad», criticaron.
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