La Universidad de Jaén ha investido doctor honoris causa al cantante linarense Rafael Martos Sánchez (Raphael), en reconocimiento «a sus extraordinarios méritos en el campo de las artes», según han informado desde la propia institución académica.
El acto se celebró este lunes 2 de diciembre en el Aula Magna del Campus Las Lagunillas, y estuvo presidido por el rector Nicolás Ruiz, quien afirmó que con su incorporación al claustro de doctores de la UJA «entran en nuestra Universidad más de 60 años de cultura universal, de dedicación vital y de talento incuestionable».
El Claustro Universitario aprobó el pasado 15 de julio a iniciativa del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal, la propuesta de concesión de doctor honoris causa al cantante Rafael Martos Sánchez (Linares, 1943), destacando que «está sobradamente justificada, a la luz de la excepcional carrera artística y de los incontestables méritos que atesora este jiennense-linarense universal».
Durante la solmene investidura el rector entregó a Raphael los atributos, título, medalla, birrete, el libro de la ciencia y la sabiduría, anillo y guantes blancos, y el cantante linarense a hizo su juramento-promesa.
Raphael: «Siempre he buscado ser un intérprete que conmueve, que sacude y que despierta sentimientos»
En su intervención Rafael Martos se refirió a su ámbito profesional con artista: «Cantar -dijo- es en muchos sentidos actuar, ponerse en la piel del otro, vivir de lo que se canta y arrastrar al oyente a ese mismo viaje, emociona mucho».
En este sentido, Raphael aseguró que «nunca» le había «interesado ser simplemente un cantante», puesto que siempre había buscado «ser un intérprete que conmueve, que sacude y despierta sentimientos, porque en la música -añadió-, como en la vida, lo esencial no es la percepción, sino la verdad; y en esta búsqueda de autenticidad es donde reside el verdadero poder de mi interpretación”, ha declarado.
También destacó que durante su trayectoria profesional había procurado mantenerse fiel a sí mismo, «resistiendo las modas y las opiniones que intentan encasillarnos». Y, «al mirar atrás -señaló- me doy cuenta de que el trabajo constante y la perseverancia en uno mismo han sido las claves para mantener viva mi ilusión».
Raphael expresó su «profundo agradecimiento» a la Universidad de Jaén por haber sido investido doctor honoris causa y afirmó recibir «este honor con humildad y con la promesa de seguir entregando lo mejor de mí en cada canción». «Siempre he creído -concluyó- que la música no sólo la escuchamos, sino que la vivimos, la respiramos y nos ayuda a ser mejores».