viernes, noviembre 22, 2024
- Publicidad -

Investigadores del CiMUS avanzan en la búsqueda de un tratamiento contra obesidad

No te pierdas...

El trabajo, probado en roedores muy obesos que vieron revertida su enfermedad a pesar de mantener una dieta alta en grasas, abre la puerta a extender la estrategia a humanos y a otras patologías relacionadas con el cerebro, informa la institución académica compostelana en un comunicado.

El trabajo de los investigadores ha conseguido cargar vesículas extracelulares, unas nanomoléculas naturales, con un gen modificado que inhibe la acción de la proteína AMPK en un grupo muy reducido de neuronas de esta región cerebral de difícil acceso.

El profesor de Fisiología de la USC Miguel López, que lidera el grupo NeurObesity, explica que uno de los mayores problemas que implica buscar un tratamiento contra la obesidad es que muchos de los potenciales mecanismos que regulan la masa corporal están localizados en el cerebro, especialmente en el hipotálamo.

El principal obstáculo que implica poder desarrollar fármacos que actúen en el cerebro es su elevado grado de protección. «En primer lugar -explica-, está ubicado dentro de una auténtica ‘caja fuerte’: el cráneo y, en segundo lugar, cualquier molécula que tenga que llegar al cerebro tiene que atravesar un sofisticado sistema de transporte: la barrera hematoencefálica.

Esta estructura no sólo actúa como un sistema ‘de peaje’ para moléculas del propio cuerpo, sino que juega también un papel fundamental regulando la entrada de medicamentos en el cerebro».

La investigación ha desarrollado una nueva estrategia para tratar la obesidad. Según detalla Miguel López, el enfoque del grupo ha consistido en utilizar vesículas extracelulares, un tipo de nanopartículas naturales presentes en el organismo, cuya ventaja reside precisamente en su tamaño.

«Son tan pequeñas que se pueden colar sin pagar el peaje a través de la barrera hematoencefálica, pero, sin embargo, son lo suficientemente grandes como para ser cargadas con otras moléculas, por ejemplo, un fármaco, y actuar como mecanismo de transporte», expone.

El grupo del CiMUS de la USC ha conseguido cargar esas moléculas con un gen modificado que, al expresarse, inhibe la acción de la proteína llamada AMPK, específicamente en un grupo muy reducido de neuronas del hipotálamo. Con esta estrategia han conseguido revertir la obesidad en ratones muy obesos.

Lo interesante del modelo es que los ratones obesos, a pesar de seguir ingiriendo una dieta con elevado contenido en grasa (60 %) perdían peso, como resultado de un mayor gasto calórico en el tejido adiposo pardo, cuya principal función es la termogénesis, es decir, generar calor en respuesta al frío exterior. EFE

 

A.M.

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -