El estudio, que ha publicado la revista científica BMJ Global Health, ha analizado los datos de 8 países -Australia, Brasil, India, México, Arabia Saudita, Sudáfrica, España y Tailandia-, y concluye que hay que tomar medidas urgentes para revertir la tendencia creciente de esta problemática.
Con los resultados de este estudio, la Gasol Foundation de los baloncestistas Pau y Marc Gasol, que tiene su sede en Sant Boi de Llobregat (Barcelona) y es miembro de la World Obesity Federation en España, ha advertido de que esta nueva evidencia científica «debe ser un estímulo para potenciar la implementación de políticas conjuntas que permitan hacer frente a las causas de la obesidad».
La fundación Gasol ya hizo esta misma petición en el informe del estudio PASOS 2019, que reveló que la prevalencia del exceso de peso infantil era del 34,9 % en población de 8 a 16 años en España.
«Tenemos un mensaje simple para los Gobiernos: la inacción sobre la obesidad, la falta de ambición y la descoordinación en las respuestas de salud pública están perjudicando a los colectivos en situación de vulnerabilidad socioeconómica, y el impacto se puede ver en toda la sociedad», ha comentado en una nota de prensa Johanna Ralston, directora ejecutiva de la World Obesity Federation.
Según la fundación Gasol, el estudio se ha encargado en respuesta «a la continua inacción sobre las causas fundamentales del sobrepeso y la obesidad», una enfermedad crónica, recurrente y progresiva con la que viven 800 millones de personas y que está aumentando más rápidamente en los países de ingresos bajos y medianos.
La fundación de los hermanos Gasol denuncia que las estrategias de obesidad existentes a menudo se centran únicamente en la persona y no abordan las causas sociales, biológicas y del entorno que son responsables del aumento de los niveles de obesidad, como la genética, la falta de acceso a sistemas alimentarios saludables o la publicidad agresiva.
Al ampliar la evidencia científica sobre el impacto económico nacional, los autores esperan que «se emprendan acciones que produzcan un cambio real en esta tendencia».
El cálculo de los costes de la obesidad en cada país se ha hecho considerando tanto los gastos directos, como los de atención médica y los asociados con viajes a los centros sanitarios, y los costes indirectos, como la mortalidad prematura y el absentismo laboral.
Los resultados apuntan a que los costes indirectos representan el 65 % del impacto económico total.
El estudio indica que en 2019 un IMC alto le costó a España 25.136 millones de euros, es decir, el 2,1 % del PIB español, lo que supone un gasto per cápita de 537 euros durante ese año.
Para 2060, se espera que los costes globales aumenten a 52.900 millones de euros, el 2,4 % del PIB, suponiendo un coste per cápita de 1.289 euros.
El estudio también indica que en 2019 el alto IMC hizo que los costes en Brasil, Arabia Saudita y Australia alcanzaran 39.000 millones de dólares, 19.000 millones de dólares y 24.000 millones de dólares, respectivamente, lo que equivale al 2,1%, 2,4% y 1,7% del PIB de estos 3 países, con tendencias similares también en México, Sudáfrica y Tailandia.
Si no se toman medidas urgentes, se prevé que el impacto económico en los ocho países analizados aumente entre un 2,4% y un 4,8% para 2060. EFE
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