La supresión de nueve canales, que podrían ser diecisiete en breve, sigue manteniendo en pie de guerra a las cadenas con el Gobierno. La última fórmula para manifestarle que no están dispuestas a ceder ya en nada es como consecuencia de la solicitud de la ministra Ana Mato de adelanter el «prime time».
Las privadas ya le han hecho llegar al Ministerio de Sanidad una contestación a esa propuesta de adelantar el comienzo de los informativos a las 20:00 horas para que las series y las películas no terminen más tarde de las 23:00 horas, dejando claro que no adelantarán ese horario de máxima audiencia, como había propuesto la titular del mismo.
El motivo que argumentan para ello es que «las cadenas reflejan los hábitos y no los crean», o lo que es lo mismo que «son los ciudadanos quienes marcan las pautas y tendencias en los horarios de emisión, y no al contrario».
Las cadenas le han hecho saber a la ministra que «el 'prime time' no es el que determina el comportamiento del público, sino que es éste el que está adaptado al comportamiento de la gente«, por lo que se muestran proclives a revisar los horarios cuando los hábitos de los espectadores cambien.
Por otra parte, los operadores privados han instado al Gobierno a impulsar ese cambio que Ana Mato propone usando RTVE: «El Gobierno a través de la televisión pública dispone de las herramientas necesarias para iniciar ese cambio si es que lo consideran oportuno y necesario». En este sentido la cadena pública reclamó «un consenso» de todos los operadores «que ahora mismo no se da».