Sálvame Deluxe empezó este viernes calentito. Y es que la protagonista de la noche era Carolina Sobe. La exconcursante de GH, se sometió al #polideluxe para contestar unas preguntas sobre Amador. El bombazo llegó cuando Rosa interrumpió a María Patiño para decir que ha hablado con su hijo y luego con Amador.
«Escuchame lo que te digo. Como mi hijo pequeño siga en la calle te juro que te mando a la policía. Es un menor y son las 10:30, y está en la calle porque tu estás en el ático en compañía con una señora. Y como yo me entero que le dices algo, la que te voy a denunciar soy yo. Cuando no esté mi hijo metes a quién te de la gana, pero cuando esté mi hijo no».
El reportero Omar Suárez, desvelaba el nombre de la mujer que estaba acompañando a Amador ahora mismo en la casa de Chipiona y Rosa no dudó en interrumpirle para decirle lo siguiente.
«Jacqueline, que no se te ocurra decirle a mi hijo «hijo». Le he parido yo, con todos los dolores del mundo, que no se te ocurra llamarle a mi hijo «hijo» porque te arrastro. Mis hijos son mios porque los he parido yo con dolores».
Así comenzaba la noche y desde luego nos dejó a todos asombrados. El polígrafo de Carolina Sobe siguió en el que había algunas preguntas en las que Rosa se la veía cada vez más indignada con su exmarido.
Tras el polideluxe a Carolina Sobe, Amador Mohedano entró por teléfono. Cargó contra Rosa, contra Mila Ximénez y contra Kiko Matamoros. Amador Mohedano entró al programa puntualizando que no estaba borracho, tras puntualizarlo, empezó a cargar con todo el programa: «Tenéis muy poca vergüenza todos».
«De Rosa Benito no he hablado nunca. Lo único que he hablado de Rosa a Carolina es cariñoso. Ahora no quiero hablar nada ni que me conteste a nada», dijo Amador Mohedano.
La bronca siguió con Mila y Kiko e incluso hubo insultos, que María Patiño intentó solventar la disputa lo mejor que pudo. Amador se enzarzó con todos los colaboradores, y llegó a negar a una Rosa de rodillas en el plató que él nunca le ha robado dinero ni la ha dejado endeudada, y que si es así, que lo demuestre.
A Rosa Benito cada vez se la veía más indignada y terminó por callarse y expresar caras de incertidumbre y rabia al escuchar al padre de sus hijos decir todo lo que estaba diciendo. «Éste no es el hombre que yo conocí», sentencia Rosa.