La televisión, como mejor medio de alienar a la sociedad. Eso es más o menos lo que pretenden las autoridades chinas, que quieren aprovechar la nueva temporada televisiva, que comenzará en septiembre, para concienciar a la población de sus creencias.
Así podría entenderse después de que la Administración Estatal de Prensa, Radio, Cine y Televisión de China, un organismo que se encarga de llevar a cabo y ejecutar las acciones de censura en dicho país, haya ordenado recientemente a los canales de televisión que emiten dentro de sus fronteras que emitan contenido «patriótico» y «antifascista» durante el horario de máxima audiencia en los meses de septiembre y octubre.
En este aspecto, consideran series «antifascistas» aquellas que tratan la guerra contra la invasión de Japón; por otro lado, entienden por contenido patriótico aquellas guerras en las que participaron militares o héroes locales considerados «modélicos».
La fecha elegida por dicha Administración para llevar a cabo esta obligación coincide también con la celebración del Día Nacional de China, que recuerda cada 1 de octubre la fundación de la República Popular. Respecto a esta imposición, los productores chinos han hecho ya públicas sus quejas y destacan que esta norma «elimina la creatividad de los escritores».