Lo que nunca hace Mediaset, en cuyos canales no suelen aparecer protagonistas de la competencia para no promocionar sus espacios, sí lo hace Atresmedia, donde es habitual que en los suyos sí acudan invitados «rivales». Uno de los que suele hacerlo con frecuencia es 'El Hormiguero', pero lo de este miércoles resultó excesivo hasta para su presentador.
Pablo Motos terminó hasta molesto por la insistencia de su madre, en su habitual intervención telefónica, en hablar con Los Morancos, los invitados de su hijo, no del espacio de éste sino de 'Pequeños gigantes', justo en el día en el que éste celebraba su gala final.
Amelia le preguntó a Jorge Cadaval por “el programa ese que hacéis…”, mientras César Cadaval miraba al presentador y su hermano intentaba pasar rápido del tema con humor: “Sí, el de la cadena… el de mi cadena”. Eso no sirvió para contentarla, ya que volvió con el tema precisando más: “Sí, el de la 5, el de los pequeños…”, “Gigantes”, concluyó su título Jorge Cadaval.
Ahí fue donde intervino por primera vez el presentador para declrla: “Gracias por tu ayuda mamá, sigue”, y a fe que ésta lo hizo diciéndole a Jorge que «das la sensación de que eres muy cachondo, pero en los ‘Pequeños Gigantes’ me has demostrado que tienes un corazoncito, porque te he visto llorar”.
Ante tanta insistencia, Pablo Motos volvió a decir: “Dejad de hablar de la otra cadena, por favor. Si no os importa”, pero ya parecía imposible y Jorge Cadaval bromeó afirmando que “tengo mi corazoncito desde pequeño porque si no, no estaría vivo. Pero la verdad es que yo lo paso fatal”, lo que hizo que su anfitrión intentara por enésima vez poner fin al tema: “Dejad de hablar de la otra cadena, por favor. Si no os importa. No me parece mal que lo hagamos un rato, pero no toda la noche”.
Mientras Jorge Cadaval se sorprendió con un “bueno, hombre”, pero volvió a hacer otra referencia subrayando que “el programa va muy bien. Aunque estemos en Antena 3, hay que decirlo”, Amelia tomó de nuevo la palabra para confirmarlo: “Si es que el pobrecito, cuando dio la nota…”, pero su hijo la interrumpió: “¡Qué no! ¡Qué no!”, y concluyó con un “muy bien, pues nada, yo si queréis me voy a dar una vuelta”.