miércoles, septiembre 25, 2024
- Publicidad -

La «piratería» televisiva hunde el barco del fútbol español

No te pierdas...

Mientras la LFP y el Real Madrid se pelean por 120 millones de euros por temporada por los derechos internacionales de televisión, nadie parece dar con la solución al gran problema de nuestro fútbol, la piratería televisiva que le hace perder al fútbol español más de 500 millones de euros anuales. 

En esa cantidad, en concreto en 509 millones de euros, fue lo que estableció el Observatorio de Piratería y Hábitos de Consumo de Contenidos Digitales las pérdidas del fútbol en 2014, año en el que se piratearon 139 millones de partidos, siendo 1,8 millones de hogares los que visualizaron los mismos.

Ni tan siquiera la reciente sentencia de un juzgado mercantil de Madrid de ordenar el cierre inmediato de rojadirecta.es, que rápidamente la LFP se apresuró a catalogar como «un precedente y un primer paso muy valioso en la lucha contra la piratería y las emisiones ilegales de contenidos protegidos» parece que va a poder poner fin al remedio. 

Esta web, que utilizan millones de posibles espectadores para ver cada fin de semana, tiene ya la orden de cesar de manera inmediata sus emisiones de partidos de Liga, bajo amenaza de ordenar a los prestadores de la señal que «suspendan la transmisión, el alojamiento de datos, el acceso a redes de telecomunicaciones o cualquier otro servicio equivalente».

Pese a esta sentencia, que ha sido tomada a petición de Gol TV y Mediapro, los grandes perjudicados en el pasado curso futbolero, no sólo se puede todavía interponer un recurso de apelación sino que los procesados pueden sacarse de la manga otro as como han hecho siempre que han tenido que evadir medidas cautelares similares, como cambiar el dominio de la página o el servidor, que en ese caso estaría ubicado en otro país. 

El «enemigo número uno»

A Igor Seoane, administrador y socio único de la sociedad mercantil rojadirecta.com, se le ha achacado la realización de actos de competencia desleal y hasta se le ha acusado de infringir derechos de propiedad intelectual de ambos operadores televisivos. 

Por lo demás, y al más puro estilo de Amancio Ortega, poco más se sabe de este gallego que de ser tan anónimo ha pasado a ser leyenda urbana. Eso sí, con la salvedad de que su página web ronda los dos millones y medio de usuarios únicos, los que acceden a ella para ver partidos de fútbol gratis a través de distintos enlaces.

Su historia comenzó en 2005, cuando creó la sociedad Puerto 80 en Perillo (La Coruña), compañía propietaria de rojadirecta. Eso sí, lo que en un principio comenzó como web de foros y enlaces de vídeo por streaming, pero sin contenido alguno, se le ha terminado yendo de las manos, en cuanto a visualizaciones se refiere, hasta el punto de que algunos medios le atribuyen a su dueño la frase «yo soy como Google». 

Eso sí, a diferencia del coloso californiano, a él se le han ido acumulando demandas, aunque de todas parece que está saliendo con facilidad. En 2007 ya fue denunciado por Audiovisual Sport, pero el caso fue archivado y después, tres años más tarde, desestimado, al considerar la justicia que el enlace de retransmisiones deportivas no es delito en España. 

Sus enfrentamientos con la Justicia incluso traspasaron fronteras, llegando a ser procesado por la estadounidense en 2011. Aunque ésta bloqueó en un principio los dominios .org y .com de su web, acusado de violar leyes que prohíben la distribución de materiales con derechos de propiedad intelectual, su caso también terminó siendo desestimado.

Hogares «legales» e «ilegales»

Seoane sí ha logrado aunar a todos los estamentos del fútbol en su contra, sobre todo porque la LFP ha fijado en más de un millón el número de usuarios que cada fin de semana utiliza las páginas web de enlaces que facilita rojadirecta para ver sus partidos. 

Es quizás en lo único en lo que se puede decir que van de la mano los dos grandes clubes españoles, porque el director general del Real Madrid, José Ángel Sánchez, cree que «es un delito y así debería tratarse», mientras que el hasta ahora presidente del Barcelona, Josep María Bertomeu fue más allá e incluso propuso «educar y formar a la gente, para que se conciencie de que esto de la piratería es robar». 

Hasta ahora, los clubes venían repartiéndose unos 652 millones de euros al año por los derechos audiovisuales, cifra que se está intentando multiplicar casi por dos, sumando los derechos nacionales e internacionales.

Pues bien, según sus cuentas, hasta esta última cifra podría incrementarse un 23% si se pusieran fin a esas prácticas ilegales que, por ejemplo, ocasionan cada año al conjunto de la industria cultural y creativa unas pérdidas de unos 3.000 millones de euros anuales, por la violación del derecho de la propiedad intelectual.

En total, durante 2014 se accedió ilegalmente a 4.455 millones de contenidos digitales, con un valor de mercado de 23.265 millones de euros. El fútbol, sin embargo, no está al frente de los contenidos más pirateados que lideran las películas, con el 38% del total, las series (6%) y la música (24%).

Hay que tener en cuenta que como quedó explicado en otro artículo de este periódico, el club de la Premier que menos cobra por los derechos audiovisuales recibió el pasado año unos 135 millones de euros, casi la misma cifra que se llevaban los dos «grandes» de nuestro fútbol.

La diferencia no radica tanto en haber sabido negociar mejor la venta de esos derechos sino en que en el Reino Unido hay más de diez millones de abonados, cifra muy similar a la que hay en otros países como Italia o Alemania, mientras que en España no llegan a los cuatro millones de hogares los que pagan por ver el fútbol, menos de la mitad de los ocho o nueve millones que calculan desde la LFP que podrían tener de no mediar tanta piratería. 

 

Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimas noticias

- Publicidad -