Unas horas antes de que Pablo Iglesias compareciera en el Congreso de los Diputados para anunciar su candidatura a la vicepresidencia del Gobierno, Federico Jiménez Losantos cargaba contra él y contra todos sus compañeros de partido desde los micrófonos de esRadio.
Según él, «todos ellos son los que creen que lo mejor que se ha inventado es la guillotina, que donde están bien los judíos, donde caben cinco millones de éstos, es en el cenicero de un seiscientos, como dijo el concejal de Madrid, los que asaltan capillas católicas, que predican que hay que guillotinar a Gallardón en la Plaza Mayor, los que reivindican las masacres del Frente Popular en la II República, los que han cobrado del régimen narcoterrorista de Venezuela, una banda que en cualquier sitio, con cualquier gobierno decente, tendrían que estar fuera de la ley, como ETA».
Losantos recordó que «en Intereconomía llevaban mucho a Pablo Iglesias, ahí le vi un par de veces y él se levantó y se fue», y le tildó como «un matón que impide hablar a Rosa Díez en la Complutense». Pero no sólo él, «todos los de su partido son unos niñatos matones«.
Lo malo para él es que «cuando se han descubierto todo tipo de fechorías, la sumisión a la ETA, el dinero de Irán, de Moscú, de Venezuela, La Sexta les ha protegido porque el verdadero jefe de comunicación de Podemos es García Ferreras».
Del presentador de Al rojo vivo dijo que «el que ha creado la extrema izquierda es el mismo que se inventó los terroristas suicidas en la Ser el 11-M, un tipo un poco antropoide pero inteligente, porque lo suyo lo hace bien, tiene un gran talento para el mal».
Para el conductor de Es la mañana de Federico, mucha culpa de ello la tiene Mariano Rajoy, porque «ha destrozado lo poco que quedaba de equilibrio en el sistema mediático, salvando de la quiebra al imperio prisaico y dejar lo que creó Roures en torno a La Sexta y a Público».
Lo primero dijo que lo hizo «a través de su chiquita, esa cosita que baila y espía, y enreda, mediante llamadas y presiones a los acreedores de Prisa, una empresa que debe 3.200 millones de euros, convenciendo a los del Ibex la hormiguita atómica, la bailonguilla, una nadería que no sé qué se ha creído, la chica de los recados de Rajoy, para que se convirtieran en accionistas suyos».
Por todo ello precisó que «Mariano tiene la oportunidad de decir hoy al Rey que corra el turno y que vea si alguien quiere formar un gobierno de extrema izquierda, porque es una investidura suicida para que insulten a mi partido y a mí». Losantos adelantó que «no lo hará porque es tan tonto como vano, tan zote como fatuo, tan inútil com o presuntuoso, va a querer convertir su despedida en un elogio desmedido, y lo van a machacar y triturar, algo que él merece pero el PP no».