El presidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla ha ido este martes al programa 'El Hormiguero' para ser entrevistado por Pablo Motos. Allí, después de hablar sobre la corrupción y la situación política actual, pasaban a la sección del alemán Wolfwang Maier, reportero intrépido.
Maier salía a la calle a preguntar a los ciudadanos, de la tercera edad en su totalidad, sobre los políticos y los escándalos de corrupción. Tras varias declaraciones del tipo «Esto es un desastre, como no salga el PP… Yo es que soy más de derechas que Blas Piñar» o «Va a haber otras elecciones, te apuesto un cubata», un nuevo entrevistado sorprendía a la audiencia y al propio Revilla, al que ya habían catalogado de «cantamañanas» en el vídeo.
Pablo Iglesias aparecía de repente junto a el reportero, y aseguró que el cántabro “siempre da la cara por su gente y por su tierra”, a lo que añadió que “es alguien especial y le quiero mucho”. Tras estas declaraciones, el alemán le entregó al líder de Podemos un sobao pasiego, que se comió con mucho gusto: “Por Miguel Ángel y por Cantabria hago lo que haga falta”, decía.
Tras pegarle un buen bocado, Maier le espetaba que estaba envenenado, a lo que Iglesias respondió: «Es imposible que un sobao de Cantabria esté envenenado»:
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