En su afán porque RTVE cumpla fielmente con el servicio público que tiene encomendado por ley, su Comité Intercentros, máximo órgano profesional que representa a toda la plantilla, ha querido dar este martes una rueda de prensa para denunciar la «manipulación» y la «censura» que impera hoy en día en la casa.
Para este organismo, «RTVE ha dejado se ser la referencia en los grandes acontecimientos informativos y especialmente en los relacionados con procesos electorales», porque «ha perdido la confianza y la credibilidad de la audiencia».
Según el mismo, «instituciones como el Instituto Internacional de Prensa o los Consejos Audiovisuales de Andalucía y Cataluña también han puesto de manifiesto la parcialidad de los contenidos informativos, siempre a favor de un determinado partido y con la voluntad de silenciar las protestas sociales y ciudadanas».
El Comité Intercentros ha querido hacer saber a la ciudadanía que «los trabajadores y trabajadoras de RTVE lo pueden hacer mucho mejor, pero no les dejan», así como que la única manera de poder hacerlo con garantías es «con una dirección que cumpla con lo que la ley exige de un servicio de comunicación público, financiado con dinero de todos e imprescindible para la buena salud democrática».
En el terreno laboral han denunciado que «desde hace tiempo comprobamos cómo la gestión partidista de RTVE y la represión de las críticas internas a la misma tienen graves consecuencias que exceden del ámbito profesional para entrar de lleno en el laboral», y pone como ejemplos que se ha sancionado a un informador por denunciar manipulación en un correo interno, que por ese motivo se ha trasladado a otro de destino y que un directivo ha comparado a los representantes sindicales con terroristas.
Además, recuerdan que se ha invertido dinero público del presupuesto de la casa para contratar «a dedo» a redactores con los que conformar una verdadera «redacción paralela», y que la falta de plantilla en las áreas de producción de los informativos «pone en peligro la emisión de los programas diarios o la cobertura informativa en centros territoriales».
M. Arroyo