Si por algo se ha caracterizado siempre Javier Cárdenas es por no callarse y por decir lo que piensa, aunque en algunos casos le suele causar más de un problema, como la polémica que acaba de suscitar en las redes sociales por sus palabras sobre Adolf Hitler en su programa 'Levántate y Cárdenas', de Europa FM, cuando él lo que pretendía era todo lo contrario, criticarle.
Después de unos comentarios machistas que realizó hace unas semanas, por los que sus oyentes ya estaban sobre aviso, ahora parece que ha sentado mal decir que al dirigente alemán hay que llamarle de otra forma, «dictador no puede llamársele, porque recordemos que fue elegido por el pueblo».
El presentador de Europa FM echó aún más leña al fuego al dar una noticia de un historiador austriaco que hablaba de que Hitler tuvo un hermano discapacitado, «lo cual no tendría la menor importancia si no fuera porque hablamos del vigilante de la pureza de la raza aria». Fue a partir de ahí donde puntualizó que Hitler era «un socialista convencido», aunque, según él, eso no quiere decir que sea bueno, «ojo, también van de socialistas en Venezuela y no te pierdas la barbaridad que están sufriendo allí».
Según él, «lo de Venezuela no es ser socialista es ser un cafre, igual que Hitler, me hace gracia la gente que se escuda en una ideología, no va a favor del pueblo sino de sí mismo, porque el socialismo es una cosa muy diferente y no lo que hacen estos». Pese a su aclaración, Cárdenas terminó convirtiéndose en trending topic.
Entre los numerosos comentarios en su contra hubo alguno que hasta pidió que los directivos de Europa FM, emisora del grupo Atresmedia, le cesaran. Así lo hizo, por ejemplo, la plataforma ciudadana Democracia Real Ya, «solicitamos a @europa_fm la rectificación pública y el despido inmediato de Javier Cárdenas por apología del nazismo en antena«.
Hasta una formación política como Izquierda Unida entró en el debate a través de su cuenta de Twitter afirmando que «dice Javier Cárdenas que Hitler era un socialista convencido. Creemos que Bayer, Ford o Siemens no opinan lo mismo».
M. A.