Aquella insinuación de tongo que hizo Mercedes Milá de Supervivientes sigue trayendo cola. Si primero se rumoreó que a la cadena no le había gustado nada esa afirmación, motivo por el que podría haberla retirado de la presentación de Gran Hermano, ahora es Mila Ximénez, a quien iba dirigida la crítica, la que ha cargado contra ella.
La verdad es que ya dejó entrever a su llegada a España que su relación con la Milá no era nada bueno, al asegurar en el plató del reality que «lo que diga Mercedes me la bufa», pero ahora ha sido más clarita aún, quizás porque la han pagado generosamente por ello.
La colaboradora de Sálvame ha querido contar su aventura en la isla y confesar todos sus pensamientos en la revista Lecturas a cambio de 35.000 euros, la cantidad que, según Informalia, le habría pagado la publicación.
Por esa cantidad muchos televisivos venderían hasta a su madre, pero Mila ha aprovechado para cargar contra la Milá, la misma que dijo en el programa de María Teresa Campos ¡Qué tiempo tan feliz! que sería la ganadora de Supervivientes porque así lo quería Sálvame y hasta la cadena.
Ahora, la que al final quedó como tercera en el reality ha tildado a la periodista como «una indecente» por sus declaraciones, que a buen seguro tendrá su réplica en los próximos días.
Además, Mila Ximénez ha aprovechado para dar su opinión sobre el supuesto miedo que infunde entre sus compañeros, como demostró el polígrafo de Sálvame Deluxe, y más concretamente en Lydia Lozano. Según ella, «tiene miedo de lo que sé», aunque no ha querido profundizar más en ello.
M. A.