Quizás tampoco conozca al escritor, poeta y dramaturgo inglés, pero lo cierto es que Leticia Sabater parece que se ha tomado muy al pie de la letra la frase de Oscar Wilde “que hablen mal de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen“.
Cuando dijo que Kuala Lumpur era un insulto y no la capital de Malasia, en apenas 24 horas registró más de cuatro millones de reproducciones en Youtube, se mandaron más de 20.000 twits y Google tuvo más de20.000 búsquedas relacionadas con ella o con su vídeo, pasando al octavo puesto de sus tendencias diarias.
Desgraciadamente, y como ocurre con otros personajes como Mariló Montero o Jordi Hurtado, que cada vez que hablan cuentan con el retuit asegurado, esta no es la primera vez que Leticia, un personaje clave en nuestra historia televisiva desde que debutara en 1986 ante las cámaras como figurante en el mítico Un, dos, tres, ha aumentado su fama no por su trabajo sino por sus ‘ocurrencias’.
Sobre todo en este siglo XXI actual, que no quiso darle el mismo protagonismo que había tenido en el anterior, hasta que TVE decidió cancelar, en 1999, el contenedor Con mucha marcha. A partir de ahí, casi toda su popularidad se la ha tenido que ganar a pulso con otras cosas.
Sueños eróticos
Hasta ese ‘fatídico’ momento, Leticia sí era popular por su trabajo, ya fuera como azafata de la Vuelta Ciclista a España, o como ‘chica Hermida’ en Por la mañana, o con el espacio infantil No te lo pierdas, con el que, junto a Enrique Simón, le llegó su primera gran oportunidad.
Esa popularidad la llevó a fichar en 1991 por Telecinco, donde creció gracias a espacios como Desayuna con alegría, A mediodía, alegría y Vivan los compis, que compaginó con otros proyectos de la casa como Mañana serán estrellas o Campeones en la playa.
Ella justificó con posterioridad sus provocativas vestimentas en esos espacios infantiles en los deseos de los pequeños «iba más sexy de lo que se debe ir en un programa infantil, pero los niños elegían este tipo de presentadoras». También aseguraba que “les hacía gracia mi imagen de Lolita». Eso sí, presumió de que “tenían sueños eróticos conmigo”.
Su fama hizo que probara en otros campos, y lo mismo debutó en el teatro con la obra Mejor en octubre, junto a Arturo Fernández, que inició su carrera musical, con el lanzamiento de singles como Tu vecina favorita o, al más puro estilo Bertín Osborne, En tu casa o en la mía, que alcanzaron los puestos 14 y 36, respectivamente, en la lista de Los 40 Principales.
Y hasta ahí. A partir de ese momento poco parecía importar en este país que varias generaciones de españoles hubieran crecido con sus espacios infantiles, sus clases matinales de gimnasia en La 2 y su Leti-Rap. Las cadenas dejaron de contar con ella para proyectos serios y tuvo que inventarse otras cosas, como aparecer con noticias de dudosa veracidad, buscar novio mediante una convocatoria online o confesar haberse operado para volver a ser virgen. Cualquier cosa valía para, al menos, ser trending topic o aparecer en Sálvame.
Sus ‘gestas’
Quién no recuerda ese vídeo que publicó en 2012, que ella misma difundió por las redes sociales, con el que, a modo de casting, pretendía encontrar el amor. El único requisito que ponía era que los interesados fueran mayores de edad, así como que se pusieran en contacto con ella o por correo electrónico o a través de Twitter, pero ni por esas la idea funcionó.
Claro que para llamativa su decisión de gastarse 6.000 euros en reconstruirse el himen, que, por supuesto, intentó sufragar paseándose por las televisiones hablando de sus intimidades, como su pérdida de la virginidad porque tuvo un accidente con un columpio y las secuelas de problemas “con los penes grandes», argumento con el que justificaba su operación. Para volver a perder la virginidad afirmaba que le gustaría que el hombre que lo hiciera fuese Albert Rivera, el líder de Ciudadanos, que se lo tomó con humor: «Que haga primarias y se busque otro candidato».
También comentó en los platós el vídeo en el que aparecía practicando sexo con un novio suyo en una playa de Valencia, y no en un lugar solitario sino mientras aparecía gente paseando por la orilla. De aquello dijo que «era una vergüenza» que alguien lo hubiera grabado y reveló que «me han ofrecido mucho dinero por salir desnuda», algo que luego terminaría haciendo también.
Claro que no se sabe si fue más bochornoso eso o su intervención en el programa de Telecinco La Caja Deluxe, en el que famosos se sometían a una entrevista psicológica que hacía un recorrido por toda su vida. En el espacio ella confesó cosas como que «nací muy fea y medio tonta”, que su abuelo pensó de ella que «no tenía solución» o que en el colegio la llamaban «fea y china».
Política y música
Esa ‘tontuna’, pese a que llegó a afirmar que “la gente creía que era tonta y por eso fui a los 'realities', parece que se le fue corrigiendo con el tiempo, o al menos eso debió creer ella misma al atreverse a dar su opinión en público de temas políticos como el de la inocencia o no de Mario Conde: «En ningún caso me imaginaba que podría pasar esto, pero sigo pensando que Mario es inocente». Ya de paso aprovechó para confesarle al mundo que tenía parentesco con el banquero porque su tía es hermana de Lourdes Arroyo, la fallecida mujer del banquero.
Según manifestaba este mismo año, “ya ha pagado bastante y se le debería otorgar la presunción de inocencia. Me parece excesivo el trato que se le ha dado comparado con casos como los Pujol, y creo que está siendo víctima de un saqueo mediático que no se arregla si luego él es inocente. El daño ya está hecho».
Incluso decidió compartir con sus seguidores su voto en las últimas elecciones del 26 de junio, que fue nulo porque decidió meter las papeletas de los cuatro principales partidos en un mismo sobre, que acompaño con la frase: «Los cuatro me encantan, que gane el mejor. No sabía a quién votar».
Tampoco parece haber sabido nunca su estilo musical, aunque sí que cantase lo que cantase tenía que ir acompañado por un gran show. Quizás por ello haya dejado videoclips para la posteridad como ‘Mr. Policeman’, ‘Ymca’ o el actual de 'La salchipapa', con el que pretende convertirse en la canción del verano.
Tan prolífica como es, hasta se atrevió a formar parte de un circo llamado 'Fronze', en el que ella imitaba a la princesa Elsa de la película ‘Frozen’ de Disney (no querían pagar derechos de autor, y de ahí el intercambio de letras). Sin duda que, como ha quedado reflejado, ha tenido actuaciones más memorables.
M. Arroyo