Después de unos días en los que parecía que había vuelto la normalidad, o precisamente por eso, para que no se apague la llama de esta polémica, Olvido Hormigos ha vuelto a sacar a colación su relación con Alessandro Lequio que tanto juego está dando a los programas del corazón.
La exconcejala le ha recomendado al conde que mejor que se esté calladito con la frase «no me tires de la lengua», dejándole entrever que de seguir hablando o, mejor dicho, negando la evidencia de su relación con ella, podría airear otras muchas cosas que no le dejarían muy bien parado.
Olvido Hormigos, que en la actualidad se encuentra de vacaciones en Viena, quizás con el dinero que ha conseguido recaudar en la televisión y en las revistas por su supuesto affaire con Lequio, así se lo ha hecho saber. «Sé muchas cosas que pueden dejar a Lequio en muy mal lugar».
A modo de adelanto de su amenaza, ha precisado que «los miércoles estaba con él de las dos a las cuatro y media o cinco, si se va después a jugar al golf o no, no lo sé», en clara referencia a lo que dijo ella de esos presuntos encuentros sexuales en casa de él, cuando su mujer estaba fuera.
La colaboradora de Mujeres y Hombres y Viceversa ha recordado además que «me presentó a un amigo suyo, algún viernes le veía y me decía que el sábado jugaba con Lequio», confirmando que no está dispuesta a que el tema desaparezca fácilmente de los medios.
Mientras, la otra parte, Alessandro Lequio, sigue sosteniendo que todo lo que dice la exconcejala de Los Yébenes es fruto de la imaginación de ésta, «pertenece a la ciencia ficción», y que si él no se defiende más en los medios es porque «me resisto a formar parte de ese circo mediático». Él dice tener muy claro que «cualquier cosa que diga es alimentar el negocio de esta señora».
M. A.