De momento, el espacio en el que ahora colabora no ha conseguido todavía despuntar en audiencias, aunque como ella misma dice «a Gran Hermano le cuesta normalmente arrancar, pero están pasando muchísimas cosas y pienso que va a pegar un subidón muy importante y volveremos a las grandes cifras», pero Carmen Alcayde sigue sin morderse la lengua fuera de su plató.
Lo único que quiere desterrar cuanto antes la otrora presentadora de Aquí hay tomate son los insultos que se producen dentro de la casa, «es la primera vez que alguien le dice a otra marrana y guarra», y considera que «ya está bien que las mujeres nos desacreditemos unas a otras, y los hombres tirados en la silla tan felices. Yo quiero ser hombre en otra vida».
Para ella, el presentador Jorge Javier Vázquez no es el responsable de que todavía la audiencia no despunte, «él lo está haciendo fenomenal, como todo lo que hace, para delante», pero alguna de sus compañeras quizás sí tenga la culpa de ello.
En este sentido precisa en una entrevista concedida a Fórmula TV que Alba Carrillo tendría que haber actuado de otra manera muy distinta, en vez de decidir abandonar el plató y no volver. Según ella, «antes de entrar la tía estaba súper emocionada, muy embalada, y a mí me parecía bien que estuviera con nosotras, pero cuando llegas nueva a un sitio tienes que hacerlo de manera más humilde».
Ella misma se puso como ejemplo, «yo lo hice cuando, pese a presentar el Tomate, llegué de colaboradora con Belén Rodríguez y Lidya Lozano, a ver de qué iba, a ver cómo se comportaban las chonis esas». Para Carmen Alcayde, «a Alba le faltó inspeccionar un poco y ver con quién se medía, a quién llamaba choni y a quién no, y salió trasquilada».
Lo que no entiende es que no haya regresado todavía, «no ha tenido suficiente mano izquierda para volver, porque tenía que volver, porque estaba muy enfocado que daba mucho juego Alba». Para ella, , «Alba también es muy choni televisiva, hemos perdido a una choni de las nuestras».
Carmen Alcayde justifica en parte la actitud de Alba en «el punto pijo que tiene, no sé si porque es modelo o muy guapa y lo tiene que explotar», por mucho que ella la vea de otra manera, «es súper mundana, muy bruta, muy bestia, tiene esa dualidad que no ha sabido llevar, quizás porque no se ha recuperado del todo de lo de Feliciano López».
También quiso hablar de otra compañera como la navarra Maite, «se le va de la mano todo a veces porque es un espectáculo de mujer y a lo mejor no puso el freno y se pasó», y cree que si el ContraClub no ha salido adelante es porque «Pablo enseguida hiper ventila y si entras ahí tienes que saber jugar». Carmen Alcayde cree que «lo han cerrado porque no salió muy bien, pero si hubiera entrado Miguel, Bárbara o Candelas hubiera ido bien, porque María José Galera nos apetecía todo, y Amor estuvo estupenda, pero Maite, quieriendo dar juego, lo estropeó un poco».
M. A.