El año pasado, Vivendi ofreció 5.500 millones de euros para adquirir Mediaset, lo que desató la inquietud en los despachos de la división española por el posible cambio de propietarios. Ahora parece ser que es New Corporation, de Rupert Murdoch, la que está interesada en hacerse con el grupo de Silvio Berlusconi.
Así al menos lo ha afirmado este martes el director del Diario ABC, Bieito Rubido, en el programa de Federico Jiménez Losantos, en esRadio, donde ha asegurado que “Berlusconi está negociando la venta de Mediaset, y uno de los que quieren comprarla es News Corporation”.
El periodista ha dejado caer que “Berlusconi está vendiendo Mediaset, ¿lo sabéis? Podemos atender a un gran cambio”, pero Losantos le ha precisado que Murdoch lleva comprando medios españoles unos 25 años y jamás ha comprado aquí, jamás. Porque aquí seguridad jurídica, cero».
Según Losantos, «ayer ingresaron en un hospital a Berlusconi con una inflamación general. Es decir, o se ha pasado con el bótox o está tan satisfecho que realmente ha vendido Mediaset, porque ya tal como está, si lo ingresan con inflamación general es lo que dice el parte médico: Hinchado de satisfacción». Rubido ha puntualizado entonces que la verdadera causa es que «está negociando la venta de Mediaset».
Hay que recordar que Vivendi, el gigante audiovisual francés, disponía hace un año de 9.000 millones en caja tras la venta aTelefónica de la operadora brasileña GVT, pero que, pese a su deseo de invertir en España, donde decían había puesto sus ojos, no pudo adquirir Mediaset.
Esos 5.500 millones de euros que se dijo había puesto sobre la mesa la multinacional gala fue algo más que un rumor, ya que provocó un importante revuelo en Milán, donde se llegó incluso a suspender la cotización en Bolsa de la compañía de Silvio Berlusconi durante media hora. De rebote, en Mediaset España la noticia también provocó mucha intranquilidad entre los directivos de la cadena de Fuencarral.
De la intención de Berlusconi de querer vender Mediaset se lleva hablando desde el término de las elecciones generales italianas en 2001, pero lo cierto es que o siempre se ha echado para atrás o nunca ha habido una oferta que pudiera interesarle. La de ahora, según el valor del mercado, podría estar por encima de los 6.000 millones de euros.
M. Arroyo