A falta de edredoning, buenos son los striptease. Eso han debido pensar en Gran Hermano, donde uno de los concursantes se ha tenido que conformar con un bailecito erótico en vez de un revolcón con una de sus compañeras.
Meritxell, que por su manera de contonearse sin duda no se ganará la vida ejerciendo de 'full monty', cumplió cuando menos con el numerito la palabra dada de hacerlo si el francés Alain no era expulsado el pasado jueves y seguía en la casa.
La concursante de Gran Hermano había prometido hacerle un striptease a Alain si éste se salvaba y eso casi le ha causado un continuo malestar porque, como confesaba a sus compañeras, «me da mucha vergüenza».
Y eso que Clara parece que le había calmado un poco en la víspera, primero al recomendarle su vestimenta, «te pones un pantalón ajustado, un sujetador de los tuyos y un top de los míos encima y ya está», y al indicarle después que «es lo mismo que tú misma haces mirándote al espejo».
Ni siquiera le replicó que ella no hacía esas cosas delante del espejo ni le preguntó qué tenían sus prendas íntimas para que dijera eso de «un sujetador de los tuyos», como si fueran dignos del mejor sex-shop.
Por el contrario, Alain parecía estar encantado con la propuesta, y hasta no dudaba en animarla a no echarse para atrás con frases como «ya me estoy preparando para el striptease». Sus compañeros también parecían inquietos, porque no paraban de preguntarle cuándo sería la 'fiesta'.
La misma llegó durante la última fiesta celebrada en la casa, y Meritxell, después de ser debidamente presentada, compareció con un mono gris que desaparecería después para dar paso al 'look' recomendado por su amiga, con el que se sentó encima del francés y al que rodeó y dejó casi boquiabierto.
De que Alain disfrutó del momento dio fe su compañero Pol, que de inmediato le preguntó qué era “ese bulto en el pantalón”, mientras Meritxell se ganaba el aplauso del respetable con este baile sensual, ante la mirada de Rebeca, presente en el plató de ‘El Debate’.
M. A.