lunes, septiembre 23, 2024
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Penélope Cruz confiesa que se acostó con Salma Hayek

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Después de no haberlo hecho durante diez temporadas, Penélope Cruz parece haberle cogido gusto a El Hormiguero. Este jueves visitó su plató por segunda vez en apenas unos meses (abrió la temporada actual) y allí, relajada como siempre, contó algunas anécdotas de su existencia a Pablo Motos.

La actriz acudió al programa de Antena 3, junto a Chino Darín, como parte de la promoción de 'La reina de España’, la última cinta de Trueba, y reveló cómo compartió cama con Salma Hayek durante sus inicios en Hollywood.

Penélope precisó que se quedó en el apartamento de su amiga, pero “lo que no sabía la pobre es que, además de llevarme a su casa, me iba a meter en su cama”. Según ella, «soy tan miedosa que no me valía la habitación de al lado. Dormí en su casa y encima tuve una pesadilla. La agarré de la mano el primer día. Debió pensar que a qué loca había metido en su casa”.

Su compañero de reparto en la última película, Chino Darín, se sumó al tema sexual puntualizando que «mezclar sexo con comedia es raro», aunque en este caso con Penélope aseguró que ambos se divirtieron bastante rodando, «no digo en la escena de sexo, sino en toda la película”.

En otro orden de cosas, la actriz también desveló cómo se le quitó el miedo a volar: “Hace años, en un avión, íbamos vestidas de payaso por Halloween. También estaba mi padre, otras amigas, gente del equipo…estábamos rodando ‘Bandidas’. Y, de repente, vemos correr a las azafatas, a coger las bombonas de oxígeno y nos dicen, “despresurización de la cabina”, que yo sabía que eso era chungo”.

Después de un aterrizaje de emergencia y de cambiar de aeropuerto, señaló que «aunque yo tenía mucho miedo a volar, lo perdí ese día» y precisó que «pasé tanto miedo… pero a las dos horas me tuve que subir a otro y a partir de ahí no he tenido miedo a volar”.

Lo malo para ella es que parece que esa no fue la única vez que pensó que su vida llegaba a su fi nal, ya que recordó que también había sentido lo mismo bajo el agua, «otra vez me pasó buceando a 40 metros de profundidad, una actividad que no volveré a hacer pues entré en pánico, no se lo recomiendo a nadie lo de bajar tanto a no ser que estés entrenando todos los días”.

M. A.

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