Lo que para el resto de mortales hubiera sido una pésima forma de entrar en el año, quizás para Aída Nízar pueda ser el comienzo de un año prometedor, por aquello de que puede volver a estar en el primer plano de la actualidad. Y todo por sus accidentadas vacaciones navideñas y al robo que sufrió en las mismas.
Todo ocurrió en un hotel de Sierra Nevada, donde se encontraba disfrutando de unos días de esquí. En concreto fue en el establecimiento Ziryab, donde la reportera de Sálvase quién pueda descubrió que le habían robado 174.000 euros de su caja fuerte.
Como era de esperar, rápidamente presentó la denuncia en la recepción del hotel, y éste se puso en contacto con la Guardia Civil, que de inmediato se personó en el mismo. Como si del mejor detective cinematográfico se tratara, de inmediato descubriendo que se trataba de un supuesto robo por parte del asistente técnico del hotel.
Aunque en un principio éste había escapado, los agentes lograron que regresara al hotel para devolver el dinero, aunque eso no le evitó terminar la velada en un calabozo, donde esperó su paso a disposición judicial.
Para que la odisea fuera completa, la habitual tertuliana de realities de Mediaset, donde suele caracterizarse por ser una de las más polémicas asistentes, había informado al responsable del hotel que su disgusto era aún mayor porque el dinero robado no era para ella sino que tenía la intención de entregarlo a una ONG.
La responsable de Cetursa, empresa de la estación de esquí en la que se encontraba, se personó también en el establecimiento para intentar relajar a Aída Nízar, sobre todo porque al final el dinero quedó custodiado por la Guardia Civil. Habrá que ver ahora cuál es la reacción de Aída, y, sobre todo, a cuántos programas acude para contar su experiencia.
M. A.