Si en años precedentes las encuestas, sondeos y casas de apuestas nos daban entre los favoritos, y luego acabábamos como acabábamos, es difícil de imaginar el papel que puede llevar a cabo este año Manel Navarro en el Festival de Eurovisión si, a tres meses de que se celebre el mismo en Kiev (Ucrania) todo el mundo le sitúa en el último lugar. Del último, para atrás.
Por mucho que todas estas cifras tengan carácter meramente orientativo, la decepción puede hacer mella en la delegación española, ya de por sí bastante en entredicho con todo lo que se ha montado con la gala del pasado sábado de Objetivo Eurovisión.
De momento, las primeras apuestas sobre Eurovisión 2017, que tratar de vaticinar quién será el ganador del certamen de este año no son nada favorables a Manel, habida cuenta de que de los 43 países participantes estamos ocupando el último lugar, por detrás de Alemania y San Marino.
En el polo opuesto, y liderando el ranking, están Suecia, Rusia y Australia, país que, dada su buena cogida el pasado año, ha vuelto a ser invitada en esta ocasión.
Lo que no se sabe muy bien es hasta qué punto en esas apuestas ha influido toda la polémica montada con la designación de Manel Navarro para Eurovisión. Claro que sería aún peor si ese último lugar se debiera simplemente a la acogida que ha tenido la canción entre los eurofans.
España encabeza el top ten de peores canciones de esta presente edición, seguida, de abajo hacia arriba, por Alemania, San Marino, Austria, Portugal, Eslovenia, Macedonia, Croacia, Bielorrusia y Suecia. Del citado Manel depende ahora el intentar dar la vuelta a todas esas apuestas y situar a España en los primeros puestos. Eso sí, haga lo que haga va a tener complicado el librarse de esa sombra del 'tongo' que siempre le acompañará.
M. A.