martes, septiembre 24, 2024
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Fran Rivera, robado en el hotel donde se alojaba

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Ni en los hoteles de muchas estrellas puede estar uno tranquilo. Eso es lo que ha debido pensar el torero Francisco Rivera, hijo de Paquirri y Carmina Ordóñez, que ha visto cómo era víctima de un robo en el Hyatt Regency de la ciudad mexicana de Mérida en el que se hospeda.

Al colaborador de Susanna Griso en Espejo Público parece que le ha sentado muy mal tanto el hurto como la reacción de la dirección del establecimiento, que al parecer no le ha dado ninguna solución y no quiere responsabilizarse de lo sustraído.

Por ese motivo ha decidido tomarse la justicia por su mano y aprovechar las redes sociales para denunciarlo todo, intentando con ello que la gente no se aloje jamás en ese hotel. Así, ha publicado varios tweets en los que anunciaba que había sido víctima de un robo en el Hotel Hyatt Regency y que, además, lo sustraído estaba guardado de la caja fuerte de la habitación en la que está instalado.

El torero se ha mostrado muy enfadado y disgustado porque la dirección del hotel mexicano no se ha hecho responsable de lo sustraído, pese a que no ha querido precisar en ningún momento qué era lo que había perdido por la intervención de los cacos mexicanos. De momento, lo único que ha conseguido es que otros usuarios en Twitter le hayan dado la razón de alguna forma, al confirmarle que la seguridad de dicho hotel siempre ha brillado por su ausencia.

Según ha contado este martes en Espejo Público, «cuando nos hemos ido a la plaza de toros, parece ser que alguien ha entrado en la habitación. Según los responsables del hotel no era uno de sus empleados. Evidentemente nadie tenía nuestras llaves, estaban en la plaza de toros. Así que tiene que haber cómplices».

Para él, es  «una vergüenza» que el hotel no se haga responsable de los robos cometidos en las habitaciones, así como en las respectivas cajas fuertes, aunque lo más fuerte vino después, «nos han tomado el pelo de una manera horrorosa», ya que precisó que «hemos estado esperando tres horas hasta que nos han dado un impreso oficial interno para poder denunciar el robo». Ese mismo tiempo dijo que era el que había tardado el director del hotel en presentarse ante ellos, cuando en un principio les habían dicho que estaba fuera de la ciudad «y que volvería en unos días». 

M. A.

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