Lo mejor es que ha podido vivir para contarlo, y por eso ha decidido hacerlo en el programa que le paga cada mes, las Amigas y conocidas de TVE. Ese fue el lugar elegido por Sonia Ferrer para desvelar la agresión e intento de robo del que parece que fue víctima el pasado 3 de noviembre, en la localidad madrileña de Majadahonda.
La expresentadora de Gente, que ya estaba apercibida porque sabía que se habían dado varios robos en su vecindario, acudió a unos grandes almacenes, precisamente después de salir de su trabajo en televisión, precisamente para comprar unos focos con sensor, para intentar disuadir a posibles ladrones en su domicilio, cuando se vio de bruces con ellos.
Y es que en el parking de ese centro comercial fue cuando la atracaron tres hombres con la cara cubierta. Según contó en Amigas y conocidas, uno de los atracadores la golpeó en el lado izquierdo de la mandíbula tras un forcejeo al negarse ella a soltar el bolso que llevaba en la mano. Su resistencia fue inútil aunque, tras coger los cacos el botín, ella corrió tras ellos, algo que en el plato televisivo dijo que había sido un acto poco lógico por las posibles consecuencias.
Gracias a su carrera al menos logró ver el coche en el que huían y apuntó la matrícula, detalle con el que creyó que podría ser decisivo para la detención de los atracadores, pero la investigación de la policía reveló que la matrícula que la presentadora les dio correspondía a un vehículo robado. Sonia pudo contactar con los cuerpos de seguridad rápidamente porque al menos conservaba el móvil, ya que éste no estaba en el bolso sustraído sino que lo llevaba en la mano porque iba a ponerlo a cargar.
Mientras contaba su desagradable incidente, el programa sacaba un rótulo con la cuestión que más tarde resolvería la víctima: «¿Es mejor defenderse y enfrentarse al atracador o entregar todo sin oponer resistencia?». Tras contar su historia, la colaboradora dejó claro que no es buena idea enfrentarse a los ladrones por las posibles consecuencias que puede acabar teniendo la víctima, ya sean física o psicológicas. Para ella, es preferible perder bienes materiales antes que un daño personal.
M. A.