Lo que mal empieza, mal acaba. Eso de pensar los trabajadores de Trece, que vieron ya el pasado verano cómo Enrique Lozano, su nuevo director general, presentaba un plan de viabilidad que pasaba por el despido del 80%, tras acumular unas pérdidas de 63,5 millones de euros desde su lanzamiento en 2010, y que ahora ven como cinco meses después todavía no ha terminado el desfile de trabajadores de la casa.
Si en aquel entonces se impusieron recortes en informativos y se cancelaron espacios como Hoy es noticia y A la contra, ahora, y por aquello de que los números siguen sin cuadrar, la televisión de la Conferencia Episcopal Española ha decidido despedir a los presentadores de Detrás de la verdad, Patricia Betancort y Ricardo Altable, así como a todo el personal que realizaba el espacio.
Hay que señalar que el adiós fulminante de este programa de sucesos se ha producido tras las numerosas críticas recibidas por la emisión de unas imágenes de la presunta violación de ‘La Manada'. A partir de ese instante los directivos del canal no dieron una segunda oportunidad a uno de los formatos de mayor éxito del canal.
Además, no contentos con ello, el «plan revolucionario», como llaman los trabajadores al temido 'Plan de Viabilidad' que contempla despedir al 80% de la plantilla, incluso se ha llevado por delante a la presentadora Inés Ballester, que llevaba en la cadena desde sus inicios en octubre de 2011, un año después de su lanzamiento, y que en 2012 comenzó a presentar Viva el cine español, espacio que ha conducido hasta el momento, compatibilizando su labor con la presentación de Amigas y conocidas en La 1 de TVE.
M. A.