A falta de apoyos internacionales para su causa, Carles Puigdemont se ha tenido que conformar con el de una cara famosa de la televisión, aunque sea de cadenas generalistas y no de la TV3 catalana. Por ese motivo no ha dudado en posar feliz junto a Karmele Marchante, que no ha tardado en subir la imagen a su cuenta de Twitter junto al texto “con el President de la Republica Catalana en Bruselas“.
El tuit ha sido muy comentado, especialmente por muchos seguidores que han criticado e incluso llegado a insultar a la otrora colaboradora de Sálvame, que parece que con escenitas como esta no está trabajándose mucho su posible regreso a Telecinco.
Karmele acudió a Bruselas a apoyar a 'su' presidente y declaró, entre otras cosas, que “soy independentista, Puigdemont tiene el calor de los que le aman y no parece belga, espero que ganen los contrarios al 155 y que pierda el tripartito PP-PSOE-C’s, siento que ya vivo en una república catalana libre, feminista y laica“.
La periodista ya se había significado en los últimos meses como una ferviente defensora de la independencia de Cataluña, e incluso hace unos meses generó una gran polémica al asegurar que quería “quemar el Tribunal Constitucional y la Conferencia Episcopal“.
Posteriormente, la periodista volvió a defender la independencia en una entrevista en la que aseguró que se trataba de un “derecho” y de una “acción democrática“, y donde subrayó que «personalmente opto por la desobediencia civil ante la indiferencia política de un partido que gobierna desde la corrupción, la mafia y la podredumbre». Por si había alguna duda precisó que se refería “al PP“.
Hay que recordar que cuando llegó aquel tenso 1-O, la ex colaboradora de Sálvame volvió a mostrar su “angustia” por lo que estaba sucediendo en Cataluña, y una vez más cargó contra La Sexta y contra el Gobierno de Mariano Rajoy.
Con esas palabras sigue poniendo obstáculos a su ansiado regreso a Sálvame, programa que abandonó inesperadamente después de estar vinculada al mismo durante siete años, dedicándose desde entonces a la escritura, al tiempo que reivindica cada vez con más frecuencia su vena independentista, feminista. En lo único que parece haber cambiado es en su partido político de cabecera, ya que si hace unos meses era afín a Unidos Podemos ahora parece optar por el de Carles Puigdemont.
M. A.