"La muerte de Orlando Zapata ha sido un crimen terrible"

¿Cómo le ha afectado la muerte del preso de conciencia Orlando Zapata?

Estoy conmocionado por su muerte, que nos ha dolido a todos, y también nos ha cogido por sorpresa, porque a pesar de su gran deterioro, nunca pensamos que el Gobierno cubano dejara morir a un hombre de esa manera, y más teniendo los recursos que tiene a nivel médico. Sinceramente, esto ha sido un crimen terrible. Ha servido para que la comunidad internacional reaccione y que se dé cuenta de los verdaderos intereses de la cúpula que hoy gobierna Cuba, que está dominada por el miedo que tienen a perder el poder, ya que saben que la gente ya está cansada y no cree en las promesas hechas durante medio siglo. Todo el mundo ha visto que Cuba es un desastre.

¿Se han sentido en esta ocasión respaldados por la comunidad internacional?

Sí, ha sido una llamada de alerta al mundo, y es bueno que el mundo tome conciencia y que se dé cuenta de que los opositores que están en Cuba no quieren poner la isla al servicio del imperialismo yanki, como dice Fidel Castro, sino que quieren una democracia, unas libertades, espacios... Cuando un hombre está dispuesto a morir como Zapata y otros muchos, nadie sabe lo que puede desencadenarse ahí dentro de la isla, porque hay una desesperanza y una ansiedad muy grandes. Ya son muchos años de período especial, mintiendo al pueblo...

Como advertía, el caso de Zapata, sin embargo, no es el único.

Ahora mismo estoy muy pendiente del caso de Miguel Cigrera Maya, otro de los presos de conciencia que está en muy mal estado de salud, está echando sangre y vomitando, con unos dolores muy intensos. Lleva también muchos meses de deterioro tremendo, está en una situación muy crítica y nos preocupa que pueda engrosar la lista de mártires de la oposición cubana. Son muchos los casos que hoy están en las prisiones en muy mal estado.

El Gobierno cubano, acosado por la denuncia internacional, ha lanzado un vídeo para demostrar la buena atención médica que recibió Zapata durante su huelga de hambre, ¿lo ha visto?

No lo he visto, pero me lo imagino. No creo que los médicos de allí no hayan tenido intención de salvarlo. El cubano se caracteriza por ser solidario, y los médicos son indiscutiblemente buenos independientemente del régimen. No sólo los médicos, también los guardias, oficiales, son personas humanas y no creo que ante la situación de ver a un hombre morirse no fueran a hacer nada... Me parece que lo que pasó es que se esperó mucho, no creo que ellos hayan querido asesinarlo... Sobre todo porque es un rédito que ahora están recibiendo, y el Gobierno cubano sabe que la muerte de un prisionero le va a resultar negativo. Pero claro que el Gobierno cubano tiene responsabilidad en esto porque esperaron demasiado. Más de 80 días en huelga de hambre y 18 sin tomar ningún líquido... Ahí falló algo, alguien calculó mal y le ha salido muy mal la historia.

¿Le ha afectado de un modo especial el fallecimiento de Zapata al haber vivido usted mismo la prisión política?

Sí, yo sé lo que es estar allí, conozco la agonía que sufre una persona, y más cuando uno se siente inocente. La mayoría de estos hombres no han cometido delito, más que haber opinado; lo único que han emitido son ideas, que es respetado en casi cualquier país del mundo. En Cuba no se permite porque el régimen, para poder mantener todo esto, debe mantener a todo el mundo bajo represión. Es un sistema que ha fracasado, que no ha cumplido ninguna de las promesas que prometió al pueblo y tampoco quiere evolucionar.

¿En algún momento de sus ocho años sin libertad se planteó la huelga de hambre?

No apruebo eso. Los que lo han hecho son hermanos míos y respeto su valentía y su manera de luchar, pero no creo que esto vaya a resolver ninguna situación, son métodos que van en contra de uno mismo, en realidad, y ya ves las consecuencias... Y aunque lleguen a salir bien, siempre quedan secuelas.

¿Cree que el caso de Zapata ha demostrado que Raúl Castro no supone una gran diferencia para la evolución del régimen?

Pienso que Raúl es un ente más. No se puede culpar sólo a Raúl, que es un títere del grupo de poder de Fidel Castro. Creo que Raúl ha tenido buenas ideas para hacer pequeña reformas, pero se ha visto frenado. La eminencia gris, lo que está detrás de todo esto, es Fidel Castro.