La selección de fútbol ha recibido todo el agradecimiento de la afición española durante el recorrido por las calles de Madrid, abarrotadas por vecinos de la capital y de distintas ciudades para saludar a los campeones del mundo al grito de «Campeones».
Tras las recepciones oficiales en el Palacio Real y el de La Moncloa, la comitiva entró en la ciudad minutos después de las 20:00 horas por la calle Princesa para hacer el tránsito en dos autobuses descapotables, que fueron seguidos por muchos aficionados, a pie y en moto, con banderas españolas desplegadas gritando «sí, sí, sí, la copa ya está aquí».
Con un enorme «Campeones» pintado de amarillo en el frontal superior del autobús y una bandera con el típico toro español, los jugadores dieron rienda suelta a su alegría saludando al público con la Copa del Mundo en alto, que no dejó de pasar de mano en mano aunque el capitán, Iker Casillas, fue el primero en portarla.
Pepe Reina, erigido en maestro de ceremonias desde la celebración de la Eurocopa 2008, animó con vuvucela en mano a los miles de aficionados que desafiaron el intenso calor para dar la bienvenida a «La Roja», mientras Sergio Ramos y Fernando Torres no dejaban de ondear una bandera.
«El Niño» hizo un guiño a sus fieles rojiblancos y se colocó una enseña con el escudo del Atlético de Madrid. David Villa, sombrero nacional en ristre, y Juan Mata recordaron su origen asturiano con sendas banderas del Principado, igual que hizo Raúl Albiol con la de Valencia colocada a modo de falda.
Fernando Llorente y Javi Martínez desplegaron la bandera del Athletic; Joan Capdevila y Cesc Fábregas pusieron el toque de humor con sendas pelucas color rojo y gualda, junto a Jesús Navas, Xabi Alonso, Xavi Hernádez y el autor del gol de la final, Andrés Iniesta que no se cansó de escuchar «Iniesta, España está de fiesta».
El seleccionador nacional, Vicente del Bosque, junto a sus colaboradores en la selección respondía con cariño a los gritos de «yo soy español», coreados desde las aceras y calzadas de la capital por las que pasó la selección, que enriqueció la celebración del Centenario de la Gran Vía al transitarla completamente.
Finalmente a las 23:15 de la noche, el autobús de ‘La Roja’ llegó al escenario situado en la Esplanada del Rey, donde miles de aficionados esperaban a los campeones, entre ellos la Infanta Elena, para calebrar el triunfo. Con Carlos Latre como presentados del evento y tras las palabras de agradecimiento a la afición de Casillas, Villa, Xavi Alonso, Iniesta y Vicente del Bosque, finalmente la afición tuvo lo que aclamaba, el espectáculo de Reina.
Presentando a uno por uno, con rima y risas, a los jugadores, se metió una vez más al público y a sus compañeros en el bolsillo. Siempre tratándolos con mucho cariño, Reina volvió a poner una vez más la pincelada más fuerte a la celebración.
Demasiada gente
El Ayuntamiento de Madrid lanzó un llamamiento para recomendar a las miles de personas que estaban siguiendo a la selección nacional en el recorrido por el centro de la capital que se abstuvieran de trasladarse a la explanada junto al río Manzanares porque ya no cabía ni un alfiler.
En la explanada de Madrid Río, entre los puentes del Rey y de Segovia, estaba instalado un escenario donde acabó el recorrido triunfal de la selección española de fútbol tras conseguir la Copa del Mundo en Sudáfrica y un concierto.
Desde primeras horas de la tarde este espacio cedido por el consistorio madrileño a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para el evento se ha fue llenando de una marea roja que minutos antes de las diez de la noche ya estaba llena de gente.
La presidenta de la comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón se sumaron a la bienvenida, que vive su punto final en la explanada del Puente del Rey, donde Ketama, David Bislbal, David Bustamente y Hombres G, entre otros amenizaron la espera de decenas de miles de personas.