La bolsa española se decidía en los primeros minutos de la sesión por las pérdidas y su principal indicador, el Ibex-35, caía el 0,21% con los inversores decepcionados por la vaguedad de la Reserva Federal a la hora de explicar las medidas para reactivar el crecimiento.
A las 09.15 horas el selectivo español perdía 22,60 puntos y se situaba en 10.739 unidades, mientras que el Índice General de la Bolsa de Madrid, con todos sus sectores en negativo excepto Servicios de consumo y Materiales básicos, retrocedía el 0,12%.
Los inversores estarán atentos a los datos de reservas petroleras y a las peticiones semanales de hipotecas en Estados Unidos, además de los pedidos industriales semanales en la Unión Europea en julio.
El mercado no tuvo tiempo de digerir la reunión de la Reserva Federal de EEUU, que mantuvo sin cambios los tipos de interés pero expresó su preocupación por la deflación, e indicó que está preparada para intervenir en los mercados si fuera necesario para reactivar el crecimiento.
Pese a que el miércoles Wall Street cerró con una ligera subida del 0,07% en el Dow Jones de Industriales, las principales bolsas europeas seguían trayectorias distintas, con subidas en Londres (0,26%) y París (0,13%) y descensos en Milán (0,08%).
En España la mayoría de los pesos pesados y de los bancos cotizados se inclinaban por los números rojos. OHL sufría el mayor descenso del Ibex, del 0,99%, seguido muy de cerca por Inditex, con el 0,81%, Santander, con el 0,59%, y en la parte media de la tabla por el Popular, que perdía el 0,27%, Bankinter, con el 0,15%, e Iberdrola, con el 0,09%.
Telefónica cotizaba plano, y Endesa, Sabadell y Banesto lograban subidas del 0,02%, del 0,18% y del 0,40%, respectivamente. Dos compañías de sectores médico farmacéuticos ocupaban las primeras posiciones de las pérdidas y de las ganancias.
El grupo de hemoderivados Grifols lograba la mayor subida del mercado, del 4,27%, y los laboratorios Zeltia, que rebajó ayer un 20% sus previsiones de ventas para 2010, encajaba el mayor recorte, del 3,92%.
El euro abrió con fuerza al alza en el mercado de divisas de Fráncfort y se cambiaba a 1,3294 dólares, frente a los 1,3133 dólares de la jornada anterior.