El Real Madrid recuperó el mando de la serie de cuartos de final tras imponerse al Power Electronics en Valencia por 66-75, tras firmar un excepcional último cuarto, en el que destacó la figura de D’Or Fischer, que con quince puntos en el último parcial fue decisivo para decidir la suerte del partido.
El Power, que estuvo arropado en todo momento por una Fonteta abarrotada, llevó la iniciativa durante la mayor parte del encuentro, pero no terminó de romper el partido y el Real Madrid jugó mejor en el tramo final lo que le permitió llevarse la segunda victoria de la serie y tener la opción el próximo jueves de alcanzar la Final a Cuatro si es capaz de ganar de nuevo en Valencia.
El arranque del partido fue una continuación de la saga iniciada en Madrid, con fuertes defensas, una gran igualdad, aunque en esta ocasión fue el equipo valenciano quien tomó desde el principio la iniciativa aunque sin despegarse en el marcador.
El Power, de nuevo dirigido magistralmente por Cook, se mostró muy acertado en su línea exterior de la mano de Rafa Martínez, aunque la temprana segunda falta personal de Lischuk facilitó la labor ofensiva de un inmenso Tomic, que con 9 puntos en el primer cuarto, fue el que mantuvo a su equipo en ataque que acabó el primer parcial dos abajo (19-17).
Segunda parte
En el segundo acto, el Power salió igual de intenso en defensa pero el Real Madrid sin la referencia ofensiva de Tomic recibió un parcial de 11-2 de salida que permitió al equipo de Pesic cobrar una máxima diferencia de once puntos (30-19, m.16) Sin embargo la salida a pista del pívot croata y el acierto en los triples de Tucker y Prigioni permitieron al equipo madridista apuntarse un parcial de 2-10 que devolvía la igualdad al marcador al descanso (34-31).
La espesura ofensiva con la que el equipo valenciano acabó el primer tiempo se mantuvo en los primeros compases del segundo, lo que aprovechó el Real Madrid para ponerse por primera vez delante en el marcador (34-36).
Pesic y Molin jugaban la estrategia como en una partida de ajedrez desde el banquillo y el partido entró en un fase de gran intensidad defensiva por parte de ambos equipos que se quebró con unos minutos mágicos de Cook que contagió a sus compañeros y permitió al Power dar un nuevo estirón en el luminoso (51-43).
Una recuperación y un triple de Lluch dejó el escenario del partido con tres puntos arriba para los locales en el cuarto decisivo. Un parcial de 0-8 de salida del Real Madrid dio al equipo de Molin su máxima renta en el partido hasta ese momento(51-56). La cuarta falta de Lischuck y su marcha al banquillo lo acusó el juego interior de su equipo, sobre todo en ataque, ante la falta de acierto en el tiro exterior.
El partido comenzó a inclinarse de lado visitante que entró en los últimos cuatro minutos con once puntos de ventaja (56-67) gracias al acierto de un pletórico Fischer. El Real Madrid comenzó a alargar sus posesiones y el Power se encomendó a los triples de Savanovic para no tirar la toalla, pero las prisas locales y el buen hacer de los madridistas hizo imposible la remontada local y permitió al conjunto madrileño adelantarse de nuevo en la serie (2-1) y recuperar el factor cancha si hubiera un quinto partido.
Ficha Técnica
66. Power Electronics Valencia (19+15+17+15): Cook (10), Rafa Martínez (11), Richardson (6), Lischuk (5) y Javtokas (2) -cinco inicial- De Colo (5), Savanovic (21), Pietrus (6), Navarro (-).
75. Real Madrid (17+14+17+27): Prigioni (8), Llull (5), Suárez (6), Reyes (5) y Tomic (15) -cinco inicial- Velickovic (2), Mirotic (2), Tucker (13), Fischer (19)
Árbitros: Lamonica (ITA), Belosevic (SRB) y Koromilas (GRE).
Incidencias: tercer partido de la serie de cuartos de final de la Euroliga disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 9.200 espectadores.
Redacción