El Real Madrid recibe en el estadio Santiago Bernabéu con su temporada finiquitada y tan solo retrasando en el tiempo el alirón del Barcelona, a un Getafe que intentará obrar un milagro con una victoria que alejaría a los hombres que dirige Míchel de los puestos de descenso. En la jornada en la que su eterno enemigo puede firmar su continuidad como campeón de Liga, el estadio Santiago Bernabéu acoge un partido en el que el Real Madrid da los últimos pasos de la temporada, entre fichajes para la próxima campaña y la búsqueda del buen fútbol mostrado en sus últimas salidas, antes de cerrar el primer año de José Mourinho con una Copa del Rey en el bolsillo.
Tras las exhibiciones de juego y goles en Mestalla (3-6) y el Sánchez Pizjuán (2-6), la plantilla madridista desea repetirlo ante su afición y mejorar sus últimos compromisos en el Bernabéu, donde no gana en Liga desde el 12 de marzo. Las derrotas ante el Real Sporting y Zaragoza, más el empate con el Barça, enterraron sus pocas opciones de remontada.
El último entrenamiento en el escenario del partido confirmó la mejoría de Xabi Alonso, que arrastraba molestias en los abductores tras el encuentro en Sevilla, y confirmó las bajas de última de hora de los porteros Iker Casillas y Jerzy Dudek, que provocarán que Antonio Adán sea titular, más la lesión muscular de Kaká.
Mourinho recupera para medirse al Getafe a dos titulares como Ricardo Carvalho y Ángel Di María. Y pierde por sanción a Sergio Ramos, que cumplirá ciclo de amonestaciones.
Y con fichajes
En la previa del encuentro el club oficializó el fichaje del centrocampista turco Nuri Sahin, procedente del Borussia Dortmund y trabaja en cerrar nuevas contrataciones que cumplan las peticiones de Mourinho para reforzar las demarcaciones en las que piensa deben ser más fuertes para aspirar a más títulos.
Con solo el orgullo en juego, para quien no existe encuentro intrascendente es para Cristiano Ronaldo. De nuevo marcó cuatro goles, en Sevilla, y en busca de ser máximo goleador del campeonato, está a cinco tantos de igualar el histórico récord de 38 del mejicano Hugo Sánchez.
Mientras, el Getafe llega de una última jornada de Liga que resultó balsámica para un club necesitado de alegrías. Los tres puntos sumados contra el Almería y otros resultados, sacaron al Getafe del descenso. Sin embargo, el peligro todavía acecha por la entidad madrileña, que tiene que seguir sumando para que no vuelvan a sonar de nuevo todas las alarmas.
Y no lo tendrá nada fácil, porque enfrente tendrá un rival que no querrá perder de nuevo en su estadio. Otra derrota blanca dejaría a José Mourinho con números ridículos en su feudo en los últimos cuatro partidos. En total, habría sumado sólo un empate tras el paso de Sporting, Barcelona,
Zaragoza y Getafe. Por eso, la empresa de la entidad que preside Ángel Torres es muy difícil.
A eso hay que sumar que el siguiente encuentro es ante Osasuna en el Coliseum Alfonso Pérez. Los navarros son un rival directo y en el enfrentamiento con el Almería el Getafe demostró que piensa demasiado en ellos y poco en el Real Madrid. Dos de los tres jugadores apercibidos, Iván Marcano y Víctor Sánchez, provocaron descaradamente su quinta tarjeta. El tercero, Pedro Ríos, se la ganó justamente con una patada a Crusat en el primer tiempo.
Aparte de estos tres futbolistas, Míchel no podrá contar con los lesionados Rafael López y Jaime Gavilán, mientras que por contra podrían regresar Manu del Moral y Juan Albín, pendientes de unas últimas pruebas médicas. En todo caso, ninguno de los dos sería titular pensando en el choque ante Osasuna.
Sí lo será Javier Casquero, que ocupará un puesto en el centro del campo junto a Derek Boateng y Dani Parejo, que ante su ex equipo recuperará el hueco que cedió en el once frente al Almería. En la banda derecha podría jugar Javier Arizmendi en sustitución de Pedro Ríos mientras que el canterano Adrián Sardinero podría repetir titularidad en la zona izquierda del centro del campo