La candidatura de Madrid 2020 ha superado el ‘corte’ que ha hecho público este miércoles (madrugada del 24 en la Península Ibérica) en Quebec (Canadá) el Comité Olímpico Internacional (COI) con un notable alto y ha sido declarada ciudad ‘candidata’ a los Juegos Olímpicos de 2020 junto a Tokio y Estambul.
Doha, por segunda vez consecutiva, y Bakú quedaron descartadas de la carrera olímpica, según anunciaron en rueda de prensa el Director General del COI, Gilbert Felli, y el Director de Comunicación de dicho organismo, Mark Adams, en el Auditorio Principal del Quebec City Convention Center, sede de la Conferencia SportAccord desde el pasado domingo y hasta el próximo viernes 25 de mayo.
La decisión fue celebrada con júbilo por los responsables del proyecto de la capital, liderados por el presidente Alejandro Blanco, la alcaldesa Ana Botella, el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, el consejero-delegado de Madrid 2020, Víctor Sánchez, y el exsecretario de Estado para el Deporte y actual portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, que viajaron a Canadá para conocer la nueva nota que el COI ponía a Madrid 2020.
Ésta es la tercera vez que Madrid supera el corte olímpico tras las de 2012 y 2016, aunque finalmente la sede de los Juegos fue para Londres y Río de Janeiro, respectivamente. La elección definitiva de la sede de los Juegos de 2020 se llevará a cabo en la 125 Sesión del COI en Buenos Aires, que se celebrará el 7 de septiembre de 2013.
Las cábalas de los expertos pronosticaban que el corte lo superarían tres candidatas, Tokio, Estambul y Madrid, o las cinco, para tratar de justificar la presencia en la final bonaerense de Doha y sus petrodólares, los Juegos de la ultravanguardia que podían rivalizar con los de Pekín, pero en un país de dimensiones reducidas y con un calendario complicado.
Como en 2016, pero más mejorado aún, Tokio, la única de las aspirantes que ya fue sede de los Juegos en 1964, presenta un proyecto técnico «muy sólido», según la valoración del Grupo de Trabajo, aunque con el lastre de la cercanía de los Juegos de invierno en Asia, en Pyongyang (Corea del Sur), en 2018 y el miedo al riesgo de radioactividad por el tsunami que asoló el país en 2011.
La principal rival, a priori, para la capital de España podría ser Estambul, que ha recogido el mensaje de Río de Janeiro y oferta el escaparate de ‘los primeros en dos continentes: Asia y Europa’ y el poder emergente de su economía, que creció un 9,4 por ciento en 2010, pero que ha complicado sus opciones en las últimas semanas al anunciar su intención de albergar la Eurocopa también en 2020.
En cambio, el COI destaca el «buen potencial» de Estambul, aunque añade que debe mejorar algunos aspectos, caso de experiencia deportiva, transporte y seguridad, quizá dolido por su ambición de acoger la Eurocopa, a la que también optarían Georgia y una candidatura conjunta de Irlanda-Gales y Escocia y cuya sede se conocerá después de Buenos Aires, a principios de 2014.
El COI decidió finalmente dejar a Doha fuera de la línea del corte por las fechas que proponía, del 2 al 18 de octubre de 2020, que podrían crear un importante conflicto con el calendario de las principales competiciones europeas. «Creo que algunos miembros piensan que la credibilidad del COI se pondrían en entredicho sin los llevan allí», apuntó la víspera del corte a Europa Press un experto olímpico.
El portal especializado ‘GamesBid.com’ publicaba la pasada semana un índice en el que Estambul (60.20) y Tokio (59.92) llevaban la delantera sobre Madrid (55.10) y más atrás quedaban las dos descartadas, Bakú (43.66) y Doha (53.08).
Sobresaliente en dopaje
Frente a la «muy sólida» Tokio y el «buen potencial» de Estambul, la capital de España sale reforzada -según el twitter oficial de Madrid 2020 tendría una nota de 8,08 frente a los 8,02 de Tokio y 6,98 de Estambul-, pues ha mejorado en aspectos como el dopaje, con la reciente reunión con responsables de la AMA y el borrador de la reforma de la Ley Antidopaje en marcha.
El dopaje fue uno de los suspensos de Madrid 2016 para la Comisión de Evaluación, también como el ‘Concepto y Sedes’, que esta vez recibe unas notas de 9 (máxima) y 8 (mínima), y el único reparo que pone el COI al proyecto de la capital era el esperado de las ‘Finanzas’ (8 y 5) debido a la crisis económica de España «que habrá que vigilar».
Aún así, con el 78 por ciento de las infraestructuras hechas o en fase de realización, una frase que repiten como un tótem los responsables olímpicos de M2020, Madrid no presenta, como el mismo COI admite, problema alguno para la organización de los Juegos en la primera capital europea importante que aún no los ha tenido.
Con el descarte de los petrodólares de Catar, como en 2016, uno de los objetos de debate estas jornadas previas en los pasillos del Palacio de Convenciones de Quebec, la ciudad francófona, el COI ha mejorado una credibilidad que habría puesto en entredicho algunos de los valores del olimpismo, según los expertos.
Y Madrid también ha subido su cotización en la votación que realmente tenía en mente más allá de este primer examen olímpico, la del 7 de septiembre en Buenos Aires, donde conocerá si, al tercer intento consecutivo, cumple su sueño de ser olímpica 28 años después de Barcelona.
Estrella Digital/EP