La tensión se apoderó de los momentos previos del partido de Eurocopa que enfrentó a Polonia y Rusia. Los aficionados de ambos equipos se enzarzaron en peleas justo a las puertas del estadio.
Hinchas polacos comenzaron a hostigar a los aficionados rusos que no tardaron en responder, de un segundo a otro varios polacos y rusos empezaron a pegarse y a tirarse objetos mientras se insultaban, la gente comenzó a concentrarse alrededor y la pelea se convirtió en masiva, la policía que se encontraba en la zona cargó contras los aficionados.
Polacos y rusos comenzaron a correr despavoridos huyendo de las cargas policiales, pero cuando se encontraban en la huida volvían a lanzarse patadas y puñetazos entre ellos. La policía no cesó en sus cargas y dispararon pelotas de goma contra los aficionados que se encontraban en la zona.
La situación se saldó con varios centenares de heridos y más de cien detenidos de ambos países.
Dicho encuentro se consideraba como uno de los más tensos de la Eurocopa por la mala relación de los aficionados de ambos países.