La Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) ha «entablado acusaciones de dopaje» contra el exciclista Lance Armstrong en una acción que podría costarle sus siete títulos del Tour de Francia.
La USADA es la agencia que supervisa la lucha contra el dopaje en los deportes olímpicos en los Estados Unidos.
Como resultado de los cargos formales, Armstrong ha sido inmediatamente expulsado de la competición de triatlón. A pesar de las acusaciones vertidas, hay que recordar que Armstrong nunca ha dado positivo en ningñun control.
En la carta que remitió la USADA vierte varias acusaciones contra Armstrong, alegando que recolectaron muestras de sangre del exciclista en 2009 y 2010 que fueron «plenamente coherentes con la manipulación de la sangre, incluyendo el uso de EPO y / o transfusiones de sangre». En febrero, la Oficina del Fiscal de EE.UU. en Los Angeles puso fin a una investigación de casi dos años sobre acusaciones de dopaje que involucraban a Armstrong, sin presentar cargos criminales. Excompañeros de equipo del exciclista colaboraron con los agentes federales en la investigación y acusaron a Armstrong de dopaje.
En la carta de la USADA, fechada el 12 de junio, afirma que Armstrong y cinco antiguos miembros de su equipo – tres médicos, incluídos los médicos italianos Michele Ferrari, y Johan Bruyneel- participaron en una conspiración de dopaje masivo desde 1998 hasta 2011, y «los testigos de la conducta descrita en esta carta incluyen a más de diez ciclistas. La misiva alega que Armstrong usó EPO, transfusiones de sangre, testosterona, corticoides y agentes enmascarantes.
Armstrong se defiende y asegura, «nunca me he dopado, y, a diferencia de muchos de mis acusadores, que no han competido durante 25 años, pasé más de 500 controles antidopaje y nunca fallé uno», además acusa a «la USADA de falta de imparcialidad».
Redacción Estrella Digital